Oscar Recinos, vecino de Mariscos, explicó que en cada ocasión que “se cae la ruta” se quedan incomunicadas a varias aldeas de los alrededores del Lago de Izabal y el acceso al lado sur de El Estor, donde se encuentran varias fincas de palma africana, cuya única vía de salida e ingreso de los camiones con el aceite extraído es por ese paso.
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“Esperábamos lo que sucedió porque las lluvias continuaron y los trabajos que había realizado la empresa Naturaceites eran de manera temporal y el material que se colocó, fue arrastrado por la lluvia”, agregó.
Mayra Arévalo, delegada de Conred, explicó que desde el momento que vecinos notificaron que de nuevo había colapsado la ruta, un equipo especializado viajó al lugar e inspeccionó el origen del problema para efectuar un informe, documento que sirve de apoyo a las autoridades competentes para la recuperación del tramo.
El colapso de la vía afectaba el abastecimiento de productos básicos para la población, al turismo y la producción de aceite de palma africana.
Los reportes de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres destacan que el mes pasado la lluvia afectó a siete mil 864 personas en 12 departamentos.
El informe refiere que los incidentes reportados incluyen derrumbes, deslizamientos e inundaciones. Esos incidentes dañaron unas 32 viviendas, de donde fueron evacuadas 71 personas. Además, se albergaron a nueve y se reportó un fallecimiento en Zunil, Quetzaltenango, por un derrumbe.
Arévalo agregó que en coordinación con Covial y la empresa de aceite de palma africana se habilitó un paso de forma temporal, pero en esta ocasión con un puente de madera, a un costado de la ruta, de modo que el agua pueda pasar sin inconvenientes.
“No se trata de tomarse solo fotos y decir ya está reparado, se tiene que hacer un trabajo serio y no solo echar piedra y arena, por eso volvió a colapsar. Ahora con la colocación de este puente sobre una vía, esperamos aguante más, pero debe de repararse a través de un trabajo formal”, exigió el vecino, Rufino Lima.
