Las 39 personas originarias de San Antonio Sacatepéquez, Tejutla, Río Blanco, Ocós, Tacaná, San Lorenzo, San Pablo, San Pedro Sacatepéquez, Esquipulas Palo Gordo, Sipacapa, Sibinal, San José el Rodeo y San Cristóbal Cucho aseguran que la medida permanecerá hasta que se les pague los Q6 mil 730 que el Maga le adeuda a cada uno por 728 horas laboradas.

“Primero nos capacitaron y luego nos pidieron que con nuestros propios recursos formáramos grupos de jóvenes en los diferentes municipios para crear proyectos, entre ellos huertos familiares y vacunar a los animales, ahora no es justo que no nos quieran pagar”, comentó Ulises Maldonado.

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Según Leonel De León Bermúdez, delegado departamental del Maga, la problemática obedece a procesos administrativos en la sede central de la institución y aseguró que la única solución que ha existido son oficios que han retrasado el pago.

“Nos comprometemos a darle seguimiento a la deuda, porque estamos conscientes que todos trabajamos para agenciarnos de fondos para mantener a nuestras familias, pero la situación no está en nuestras manos, pues son problemas administrativos en la capital, pues son ellos quienes manejan los presupuestos y contratos”, comentó el jefe del Maga.

Los servidores cívicos que evitan que el personal de la institución ingrese a realizar sus labores, temen que no les vayan a pagar el estipendio, ya que el año pasado fueron 73 jóvenes que prestaron el servicio pero solo a 34 les pagaron y los restantes 39 no han tenido ninguna respuesta.