Croacia iba ganando por 2-0 a la hora de juego y parecía tener la clasificación para los octavos en el bolsillo, pero Milan Skoda redujo diferencias en el 76 y a falta de cinco minutos, desde el sector de los croatas se lanzaron bengalas y petardos al césped.
Peter Cech. portero de la República Checa.
Uno de ellos explotó junto a un miembro de las seguridad del estadio cuando trataba de retirarlos.
El árbitro inglés Mark Clattenburg se vio obligado a detener el encuentro hasta que las bengalas fueron apagadas, al tiempo que la policía se dedicó a buscar en las tribunas a los hinchas que las habían lanzado.
Poco después de reanudarse el juego llegó el penal transformado por Tomas Necid (90+4).
“Ellos tenían el control (del partido) y de repente perdieron el ritmo y pudimos aprovecharnos de ello. Nos recompusimos y a partir de ese momento (de la interrupción) ellos ya no hicieron nada”, añadió el portero.
