Así, se mostró ambicioso al ser preguntado por si su equipo ya había cumplido los objetivos mínimos al estar vivo en las tres competiciones cuando queda un mes de trabajo.

“No creo que tengamos que cumplir los mínimos. En este club hay que mirar los máximos, pero por los visto hasta ahora sería lo justo ganar títulos. Debemos seguir haciendo lo mismo en los cinco partidos de Liga, en la Liga de Campeones y en la final de Copa del Rey”, subrayó.

El Barcelona llega al tramo decisivo de la temporada con la plantilla al completo tras el regreso de Thomas Vermaelen, quien ayer recibió el alta médica después de diez meses en el dique seco.

A pesar de que el central belga aún no ha debutado en lo que va de temporada, Luis Enrique considera que es uno más en la plantilla y que puede ayudar tanto dentro como fuera del campo en el tramo decisivo del año.

El que sí que es un fijo en sus alineaciones es el argentino Leo Messi, quien desde la derrota en Anoeta del pasado 4 de enero sólo se ha perdido un partido.

Preguntado por si el rosarino jugará todos los minutos que quedan de aquí hasta el término de la temporada, Luis Enrique señaló que los hecho hablan por sí solos.

El líder de la Liga recibe mañana la visita del Getafe, tres puntos determinantes, por lo que negó que sus jugadores estén pensando en la semifinal de la Liga de Campeones que disputarán dentro de una semana ante el Bayern de Múnich.

“No nos hemos relajado, mañana necesitamos ser un equipo serio y concentrado. Ya vemos que los rivales no ceden”, puntualizó Luis Enrique, quien ha avisado de los peligros de un rival que ya logró empatar en el partido de ida disputado en el Coliseum Alfonso Pérez.

El equipo madrileño también logró las tablas (2-2) en el partido disputado la temporada pasada en el Camp Nou, un motivo más para tomarse en serio un duelo clave.

En cualquier caso, Luis Enrique no valoró el calendario del Real Madrid, que esta semana se verá las caras con el Valencia y el Sevilla. “El Madrid está muy cerca, tenemos que seguir ganando partidos. Dependemos de nosotros mismos”, comentó.

Por último, refirió a la decisión del entrenador del Eibar, Gaizka Garitano, de abandonar la rueda de prensa posterior al partido ante el Almería, después de que los periodistas locales se quejaran porque las dos primeras preguntas y sus respuestas fueron en euskera. “Me parece fantástico. Solo faltaría que no pudiera contestar en su idioma”, concluyó.