Además, Blatter está en riesgo de ser suspendido por el comité de ética de la propia Fifa. 

De vuelta a su papel más usual de mediador, Blatter se reunió con los dirigentes de las federaciones palestina y saudí dentro de las oficinas generales de la FIFA en Zurich, en un intento por resolver una disputa sobre la sede de un partido.

“La FIFA está funcionando bien, con sentido común e incluso sentido del humor”, aseveró el presidente de la Unión Palestina de Futbol, Jibril Rajoub, en declaraciones a The Associated Press.

De acuerdo con Rajoub, Blatter ha revocado un fallo del comité de la Fifa para la Copa del Mundo, el cual dispuso que un partido de la eliminatoria mundialista entre los palestinos y Arabia Saudí se mudara de Cisjordania a la vecina Jordania.

Los palestinos acusan a Arabia Saudí, que fue sede del partido de ida en Riad, de no mostrarse dispuesta a aparecer muy cerca de Israel ni a someterse a sus medidas de seguridad, lo que llevó a la decisión de jugar en una cancha neutral. 

“Blatter fue muy claro, al señalar que la decisión que se tomó era inválida e ilegal, y que cada federación nacional tiene el derecho de que su selección juegue en casa, incluida la palestina”, comentó Rajoub.

El encuentro se ha pospuesto tras la intervención de Blatter, dijo Rajoub, quien explicó: “hace falta más tiempo para deliberaciones y discusiones”. 

En tanto, el Comité Olímpico Internacional informó a la AP que Blatter, de 79 años, no fungirá ya como uno de sus representantes ante la Junta de la Agencia Mundial Antidopaje.

La Fifa tiene que elegir un nuevo presidente en febrero. Blatter anunció que dejaría el cargo poco después de ser reelegido en mayo para un quinto periodo, en medio de las investigaciones de autoridades suizas y estadounidenses sobre presuntos sobornos a altos dirigentes del fútbol.