Este primer revés permite al Wolfsburgo reforzar su segundo puesto y bajar de la barrera psicológica de los diez puntos en su desventaja con los muniqueses, que ahora ven recortada su ventaja a ocho unidades.

Un ‘doblete’ del holandés Bas Dost (minutos 4 y 45+2) ya había encarrilado el partido para el Wolfsburgo, que en el 53 amplió su ventaja con un tanto del belga Kevin De Bruyne.

El Bayern acortó en el 55 por medio del español Juan Bernat, pero De Bruyne (73) volvió a marcar y selló el definitivo 4-1, un revés sorprendente que marca cuando menos un cambio de tono en el torneo alemán, que hasta ahora había sido un paseo para los vigentes campeones.
El equipo de Múnich se vio en este partido con un 2-0 en contra al descanso, por primera vez en los últimos tres años.

Este 4-1 es la derrota más amplia sufrida en la Bundesliga desde que cayeron por 5-1 en abril de 2009, precisamente ante el Wolfsburgo, que ese año se proclamó campeón de Alemania.

El sábado continúa la 18ª jornada alemana con seis partidos.