Pero, las aspiraciones romanistas por el liderato podrían verse ensombrecidas por el duro recuerdo de la última víctima de la violencia en el fútbol italiano, el aficionado del Nápoles Ciro Esposito (31 años), muerto tras la agresión de un hincha de la Roma el pasado mayo.

Ante la posibilidad de altercados, la policía ha prohibido la asistencias a los hinchas de la Roma y la venta de entradas a los habitantes del Lacio, la región circundante a Roma.

El entrenador de la Roma prefiere centrarse en el fútbol y en su equipo, sin mirar a la Juventus. “El resultado de la Juve no nos atañe. Miramos a nuestro equipo y lo esencial para nosotros es que estemos concentrados“, explicó el técnico francés.

Por su parte, el Nápoles no pudo pasar del empate  (1-1) contra el Atalanta  (16) y espera que el argentino Gonzalo Higuaín, que suma dos partidos consecutivos marcando continúe la racha pese a fallar un penal en la última jornada.