Poca credibilidad

Fue un 30 de noviembre del 2010 cuando Camargo anunció que Quetzaltenango se postularía para ser sede de los Centroamericanos y del Caribe 2018.

Entregó a la Odecabe planos con siete gigantes construcciones, un proyecto envidiable de más de Q3 mil millones y que llegó a contar con el apoyo del Gobierno, principalmente del presidente Otto Pérez Molina, el Congreso de la República y las autoridades de Xelajú.

Pero su plan de llevar el desarrollo deportivo al altiplano del país cambió de rumbo, cuando no pudo participar en las elecciones del Comité Ejecutivo del COG, en diciembre último.

Una condena por juicio de cuentas le prohibió ser elegible a un cargo público. Intentó de muchas formas esquivar los obstáculos, pero nada pudo hacer y quedó fuera de las elecciones, las que ganó Gerardo Aguirre.

El 4 de diciembre, antes de abandonar su cargo, Camargo se acercó a la Odecabe y anunció que declinarían la sede para Quetzaltenango.

Sin explicaciones y sin justificaciones, su decisión convirtió en una pesadilla la sede para Xela.

Contra el tiempo

Cuando se conoció que Camargo desistió a la organización de los Juegos, las entidades que habían apoyado la candidatura, junto al nuevo comité ejecutivo del COG, intentaron rescatarla, aunque sus esfuerzos no fueron suficientes frente una Odecabe que ya no confiaba en el país.

Odecabe abrió una nueva convocatoria y aparecieron tres ciudades con una fortaleza económica grande en la región.

Las ciudades de Panamá, Barranquilla —Colombia— y Puerto La Cruz —Venezuela—, decidieron luchar por la organización del 2018 y entre ellos está ahora la decisión.

Cuatro días atrás, Aguirre se reunió con Héctor Cardona, presidente de la Odecabe, para tratar de tener un acercamiento más claro sobre la posibilidad de que devolvieran la sede a Xela.

El mayor inconveniente es la fecha de inscripción que finalizó el 31 de marzo último.

A pesar de eso, Cardona consideró la decisión de la Odecabe y “de una forma condescendiente” aceptó que el COG presente de nuevo la candidatura hasta después de la Semana Santa como fecha límite.

Aunque la oportunidad sigue abierta, Cardona parece haber perdido la paciencia con el país, porque señaló muchos incumplimientos a los estatutos de la Odecabe de la administración anterior del COG.

“Hubo incumplimiento total de los estatutos. No hicieron los pagos que había que hacer. En el contrato tenían que venir las firmas de todas las autoridades y nunca llegó. Además no cumplieron con nominar al comité organizador local”, expuso Cardona.

Además, explicó que para presentar la candidatura se tiene que hacer un pago de US$10 mil, pero consideró al COG y les dijo que no lo cancelaran, pues la administración anterior ya lo había pagado.

A pesar de eso, aseguró que no ha recibido nada. “Me parece que al Comité no le interesa solicitar la candidatura”, agregó.

El 7 de junio será la próxima reunión de la Odecabe, donde definirán a qué ciudad otorgarle la organización de las justas.

Guatemala hace los últimos intentos y, según Aguirre, solo hace falta llenar pocos requisitos para volver a estar entre los candidatos, pero las posibilidades parecen estar hacia el sur.