En la historia del deporte guatemalteco existen campeonas mundiales, medallistas panamericanas, líderes deportivas y grandes ejemplos de mujeres que han abierto el camino para encontrar el espacio que necesita el género femenino en nuestro país.
De Buenos Aires a Río
Los triunfos del deporte guatemalteco en ciclos olímpicos llegan hasta Juegos Panamericanos, donde solo se han alcanzado ocho oros;
tres de ellos, cosechado por mujeres.
Pero la participación del género femenino ha ido en aumento, pues en la primera edición de los Panamericanos de Buenos Aires 1951, tres fueron las mujeres que lograron participar, y una de ellas, alcanzó una medalla de bronce, Dolores Castillo, en trampolín.
En la última edición de estas justas, en Río de Janeiro 2007, el número que participó creció a 38, que representó el 31 por ciento de la delegación guatemalteca.
Fue en esta edición donde la karateca Cheili González alcanzó un oro para el país, pues ganó la categoría de 53 kilos.
En Brasil, también una mujer construyó un oro en vela, pues la pareja de Juan Maegli y Cristina Girola, ganaron Hobbie Cat 16.
Pero el gran momento para las mujeres en Panamericanos se remonta a Winnipeg 1999, cuando Heidy Juárez, de taekuondo, alzó por primera vez un oro ganado por una mujer, pues se consagró en la categoría de 67 kilos.
En la elite mundial
Fuera del ciclo olímpico, algunas mujeres se han colocado en lo más alto, como sucedió en el 2001, cuando Sofía Granda obtuvo el campeonato mundial de boliche, en Japón.
También el subcampeonato mundial de la karateca Cheili González en el 2004 en México o el quinto puesto de Juárez en el mundial de taekuondo en Alemania 2003.
A pesar de que el camino se ha abierto y existe oportunidad para la mujer, el recorrido aún es largo, pues el número de féminas participando en todos los ámbitos del deporte es bajo y aún hay espacios por cubrir.