Guatemala

Difícil camino del Presupuesto

Abelardo Medina, del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, y Jorge Lavarreda, del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales, en el programa Diálogo Libre, analizaron el proyecto de Presupuesto que se discute en el Congreso.

Los analistas Jorge Lavarreda y Abelardo Medina —al centro— conversan con el periodista Urías Gamarro y con la editora de Mundo Económico, Maricela Herrera, durante el programa Diálogo Libre.

Los analistas Jorge Lavarreda y Abelardo Medina —al centro— conversan con el periodista Urías Gamarro y con la editora de Mundo Económico, Maricela Herrera, durante el programa Diálogo Libre.

La aprobación del Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado para el 2016 tiene un camino difícil, y el próximo gobierno deberá implementar reajustes en las instituciones y erradicar programas clientelares para lograr objetivos, aseguraron ayer los expertos.

¿Cómo ven el recorrido del presupuesto 2016?

Lavarreda: Básicamente tenemos una trayectoria de que se vence el plazo y no se toma una decisión; hay riesgo de que no se apruebe el nuevo presupuesto y se quede el de 2015 otra vez.

Medina: Si no logran consensos, lo más probable es que no sea aprobado y el nuevo gobierno no podrá cumplir con los ofrecimientos de campaña, y aunque lo aprueben, tampoco simplificará la vida para la próxima administración.

¿Qué condiciones hay para discutir un proyecto de Q72 mil millones?

Lavarreda: Pareciera que no hay disponibilidad de bancadas mayoritarias en el tema de decir que se aceptará algún financiamiento. Sí veo que es muy complicado que ese monto se mantenga. Aunado a los casos de corrupción, es difícil que alguien se atreva a elevarlo.

¿Parece una discusión técnica por un lado, y por otro, política?

Medina: Creo que sí, se ha discutido en disminuir el presupuesto en Q52 mil millones. ¿Pero qué pasaría si no recurren a financiamiento? Solo serviría para el pago de la deuda y para financiamiento en Salud, Educación y Gobernación, y si quisiéramos que el Presupuesto no tuviera déficit, simplemente habría que cerrar todos los ministerios. Debe hacerse una evaluación técnica de cuál debe ser la cantidad de recursos que se necesita, pero también debe ser una decisión política.

Se habla de que el Presupuesto debería ser de Q52 mil millones. ¿Qué pasará si lo elevan o lo dejan igual?

Medina: Se debe analizar cuál debería ser el presupuesto adecuado para un Estado como Guatemala, la Constitución de la República define cuáles son las obligaciones del Estado, y con base en eso se debería realizar. El punto está en que el Gobierno no ha cumplido con esas funciones.

¿Cuál debería ser el presupuesto justo?

Medina: Calculamos que entre 25 y 30 años, el Presupuesto debería llegar a entre 24 y 26 por ciento del producto interno bruto. De acuerdo con la estimación que tenemos, el presupuesto de este año estaría llegando 12.9 por ciento, que significa la mitad.

Lavarreda: La discusión de esto debería iniciar no con cuánto se asignó a cada institución, sino sobre qué resultados se han tenido. Lo que la ciudadanía quiere saber es: ¿Para qué estamos pagando impuestos? Hay un espacio importante; lo que hoy se logra lo podemos hacer con menos recursos.

En caso de que no se logre aprobar el Presupuesto, ¿qué debe priorizar el próximo gobierno?

Medina: Quien llegue a la primera magistratura deberá realizar un reordenamiento de la administración tributaria y eliminar gastos que estén propensos a ser objeto de corrupción, y reabrir las ventanillas con los bancos multilaterales para obtener préstamos. La sociedad civil debe tener una fiscalización constante sobre los resultados del Gobierno.

Lavarreda: Seguimos con el problema de la deuda flotante. Habrá que hacer los ajustes, hay que contratar servicios que realmente se necesiten.

¿Han hecho números de con cuánto comenzará el Estado?

Lavarreda: Lo que no sabemos es con qué endeudamiento va a cerrar; lo que queda al que viene es ser audaz para quitar programas clientelares.

Medina: En los primeros cien días, el Gobierno no tendrá recursos; la ventaja que tendrá es que parte del financiamiento es con bonos, y con eso podrían empezar.

¿Es necesario el pacto fiscal?

Medina: Creemos que sí. Hay una parte de la población que no quiere pagar impuestos, porque cree que no son utilizados apropiadamente; pero el pacto fiscal no es solo aumentar impuestos, sino tratar el tema del gasto, financiamiento y transparencia.

Lavarreda: Hay que retomar los principios del pacto fiscal, pero tenemos que equilibrar las reformas.

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