Amazon es una de las grandes empresas que la Comisión Europea vigila con lupa por sus prácticas fiscales.
En los últimos años, dichas sociedades evitaron pagar los debidos impuestos por los beneficios obtenidos en un determinado país gracias a sofisticados montajes fiscales, que hacen pasar sus actividades por otro país.
En este sentido, la UE está investigando los montajes fiscales de grupos como Apple en Irlanda, Starbucks en Holanda y Amazon y Fiat en Luxemburgo.
Amazon sostuvo sin embargo que el cambio no se debió a las críticas formuladas contra sus prácticas, según el Süddeutsche Zeitung.
“Con frecuencia revisamos las estructuras de nuestra empresa, para garantizar que podemos servir a nuestros clientes lo mejor posible” , dijo el diario citando al portavoz de Amazon.
De acuerdo con el rotativo alemán, Amazon sumó unas ventas por valor de casi €11 mil millones (US$12 mil millones) en Alemania el año pasado.
Según otros medios, Amazon ha empezado a pagar impuestos en el Reino Unido por sus ventas en este país.