Economía

Plaga de gorgojos alarma a autoridades

Luego que el Gobierno hondureño decretara emergencia nacional por la plaga del gorgojo descortezador, el país analiza las medidas necesarias para evitar que este prolifere en el territorio.

La plaga de gorgojos ha destruido más de 700 mil hectáreas de pinares en Honduras, que han dejado pérdidas por unos 6 mil millones de lempiras, equivalentes a US$266 millones.

Medidas preventivas

Heinz Heimann, vocero presidencial, comentó que según información proporcionada por expertos, una plaga de gorgojo por hectárea contiene de 20 mil a 30 mil de estos insectos y en Honduras se disparó a seis millones de gorgojos por hectárea.

Otra de las preocupaciones, expresó Heimman, es el desplazamiento que pueda hacer diariamente el insecto, porque se estima que la plaga está localizada a entre 40 y 45 kilómetros de la frontera con Guatemala.

prevención

El presidente Jimmy Morales se reunió con representantes de instituciones como los ministerios de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Ambiente y Recursos Naturales y de Gobernación, así como del Instituto Nacional de Bosques (Inab) y el Consejo Nacional de Areas Protegidas (Conap), para tratar el tema y las acciones inmediatas que tomará el país para prevenir la proliferación de la plaga del gorgojo del pino.


“Podríamos pensar que en un lapso de menos de un mes tendremos la plaga en frontera”, advirtió el vocero.

Heimman agregó que existe negociación de madera, materia prima que entra en los aproximadamente 84 puntos ciegos que se encuentran en la frontera con Guatemala.

“Este es un tema de defensa, fumigación, poda y corte de madera sana, para lograr hacer un cordón que no permita que el gorgojo pase”, explicó el funcionario.

Condiciones

José Galdames, secretario de Energía, Recursos Naturales, Ambiente y Minas (Serna), de Honduras, dijo a Prensa Libre que el gorgojo también está presente en Guatemala, con la diferencia que aquí “no se han dado las condiciones climáticas necesarias para que se convierta en una plaga”.

El titular de la Serna explicó que se necesitan temperaturas de hasta 40 grados para que se evidencie de “manera agresiva el problema”.

El funcionario hondureño recomendó que Guatemala establezca una alerta temprana, para que cuando se empiece a notar el cambio de coloración en los bosques se puedan determinar los controles de la plaga, ya sean biológicos, químicos o mecánicos.

“Esto se debe definir en base a la afectación”, concluyó Galdames.

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