El Progreso

Comerciantes buscan vender últimas piñatas de diablos

Esperanzados en comercializar la totalidad de sus productos, algunos vendedores de piñatas para la tradicional Quema del Diablo, de El Progreso, se las ingeniaron para alejarse de la competencia y lograr mejores ventas.

Comerciantes venden piñatas de diablos en la ruta al Atlántico. (Foto Hugo Oliva).

Comerciantes venden piñatas de diablos en la ruta al Atlántico. (Foto Hugo Oliva).

EL PROGRESO.- Es el caso de Pedro Antonio Tojín Cu, quien este año decidió salir de la zona urbana de la población e instaló su puesto de venta en el km 54 de la ruta al Atlántico, algo poco común para esa zona del país.

Tojín comentó que es la primera vez que busca otro lugar para vender los diablos, debido a la gran cantidad de competencia que hay en el área del mercado en Sanarate.

“Vendemos cohetes en el mercado de Sanarate, pero este año decidimos vender diablitos, pero como hay mucha competencia tomé la decisión de venir a probar suerte a la carretera”, comentó Tojin.

Agrego que vende piñatas de distinto tamaño que tienen un costo de entre Q15 y Q35.

Varias organizaciones ambientalistas hacen un llamado a vecinos del oriente del país, para que se abstengan de efectuar la tradicional quema para evitar contaminación ambiental.

Recomendaciones

Las autoridades recomiendan a la población tener prudencia para evitar incidentes durante la tradicional Quema del Diablo, que se será el domingo, a las 18 horas.

El vocero de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, David de León, recomendó cuidar a los niños al encender las fogatas y quemar juegos pirotécnicos.

Remarcó en pedir que las fogatas no sean grandes y al terminar la quema asegurarse de apagarlas con agua o tierra, para evitar siniestros.

Gabriel Valle, de la Fundación para el Ecodesarrollo y la Conservación, indicó que son respetuosos de las tradiciones y que no se oponen a que la celebren, pero exhortan a ser conscientes y utilizar materiales que no sean contaminantes.

“Una buena opción son las piñatas”, sugirió Valle, y sugirió evitar quemar llantas, plásticos y basura, porque liberan gases altamente tóxicos.
Como ya es costumbre, en las ventas de piñatas, particularmente de la zona 1 capitalina, se pueden encontrar “diablos” de varios tamaños y precios.

Se niega a morir

La Quema del Diablo es una tradición que “ha tenido cambios para adaptarse al contexto cultural”, afirmó la antropóloga Lucía Jiménez, y, “en general,  en todas las culturas  las tradiciones se transforman con el tiempo”, lo que es   normal y   sucede desde siempre.

La profesional precisó que uno de los cambios más significativos en esa tradición es que  ya no se quema tanta basura y objetos  sumamente contaminantes, y esto se debe a las campañas en favor del ambiente.

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