Escenario

Kak’ik

El kak' ik es una comida ancestral de ascendencia prehispánica, por eso tiene el color rojo que rememora en alguna medida la sangre ritual de los antepasados en sus ceremonias. Este platillo maya q'eqchi' —que se deriva de la palabra q'eqchi' kak que significa rojo, e ik, caliente, o muy picante—, cobró nuevos sabores con los ingredientes que los españoles trajeron al Nuevo Mundo.

Según el acuerdo ministerial 801-2007 hoy es patrimonio cultural intangible, lo que se traduce en el conocimiento que se da de una generación a otra en la elaboración de las comidas tí picas, platos de carácter local que le dan identidad al país.

“Se trata de una comida que se puede degustar en cualquier época del año; no es necesario esperar fechas especiales. Aunque en cada región del país varía la receta, lo que no puede faltar son ciertos ingredientes característicos de la Ciudad Imperial, como el picante.

El kak’ ik lleva pavo, “chunto o chompipe”; tomate de árbol, miltomate, ajo, canela, clavos de olor, pimienta de castilla, entre otros “, comenta la chef Aura Regina Equité Chanquín, del Instituto Técnico de Capatícitación y Productividad (Intecap).

Esta experta de la cocina asegura que uno de los secretos para que el kak’ ik sea del agrado de todos es elegir un buen pavo y ponerlo a que se cueza con agua, sal, ajos y cebollas; y solo cuando esté suave el ave, agregarle el recado. “También es importante que todos los ingredientes hayan sido asados, para luego hervir y perfumar con hojas frescas de zamat”, comenta.

Pero un plato de kak’ ik debe ser acompañado con tamalitos blancos envueltos en hoja de plátano y una bebida de cacao.

Receta (para 10 personas)

Ingredientes

1 pavo de 10 libras
1 cabeza grande de ajo
2 cebollas grandes
Sal al gusto
Recado
7 tomates maduros
2 tomates de árbol
2 onzas de miltomate
2 cebollas
2 chile guaque grandes
7 clavos de olor
7 pimientas gordas
1 raja de canela de 5 cm.
1 taza de hierbabuena
1 taza de cilantro
Hojas de zamat, sal y chile cobanero al gusto

Preparación:

Flamee y lave el pavo. En un olla con suficiente agua, cueza el pavo con cebolla y ajo. Cuando el ave esté suave, retírelo de la olla.
Por aparte, ase los tomates, miltomates, ajo, cebolla, chiles guaque y cobanero. De preferencia, muélalos en una piedra de moler o licue hasta obtener una consistencia suave.
Agregue el recado al caldo de pavo; sazone con hojas de olor, pimienta gorda, clavos asados y machacados.
La receta puede variar según la región.

ESCRITO POR: