“Creo que nadie puede aprobar eso que se ha hecho en la sexta avenida. Es un patrimonio de Guatemala, un patrimonio de todos y ahí están los impuestos de nuestro pueblo”, sentenció el prelado.
Las declaraciones de Vian se daban mientras un grupo de vendedores acompañados de estudiantes de la Universidad de San Carlos realizaban una manifestación solicitando se les permita el uso de la sexta avenida.
Vian también cuestionó a los supuestos vendedores que destruyeron patrimonio público: “creo que a estas personas si se le debe llamar fuertemente la atención y si es necesario aplicarles algún castigo porque han pasado por encima de nuestro pueblo, por encima del dinero que nuestro pueblo ha dado para nuestra Guatemala”.
Los vendedores ambulantes se alzaron contra la comuna que ordenó su desalojo. Durante el zafarrancho destrozaron semáforos, cámaras de vigilancia y esculturas a lo largo del Paseo de La Sexta, en la zona 1.
Los destrozos provocados por el grupo durante la tarde del 10 de noviembre fueron cuantificados por la comuna en más de Q2 millones.
Pide orden
El religioso reconoció el derecho de los guatemaltecos al trabajo pero criticó a quienes quieren hacerlo de una manera informal.
“Derecho al trabajo sí, pero no como quieran y donde quieran. Todo tiene que ser ordenado”, dijo Vian al final de la misa dominical.
El arzobispo pidió a los vendedores a realizar sus actividades en los mercados porque “todo mundo quiere estar afuera, en la calle, gritando, paseando, esto no es posible”.
Vian también pidió al Gobierno la creación de más puestos de trabajo para que la población no recurra a la economía informal.
