Las víctimas iban en la lancha “Jessica”, junto a otras 19 personas cuando ocurrió el percance; sin embargo, el resto de pasajeros logró salir del mar con la ayuda de vecinos que vieron cuando se hundió la embarcación.

Los cuerpos fueron llevados a la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Puerto Barrios, luego serán trasladados a la cabecera municipal de Livingston para su velatorio.

Luís Figueroa, presidente de la Gremial de Lancheros de Livingston, dijo que se han organizado para asistir a la familia con los gastos funerarios.

Además que continuará la búsqueda de la mujer que todavía está desaparecida. 

Añadió que a partir de la fecha se tomarán medidas drásticas para obligar a los pasajeros a colocarse el chaleco salvavidas y que la persona que se niegue a portarlo no podrá viajar.

Figueroa aseguró que si algún pasajero se quita el chaleco después del zarpar, el capitán regresará al muelle.  “A las personas de Livingston no le gusta ponerse chaleco”, concluyó. 

Relato

El capitán Castillo narró que el motor se detuvo porque fue golpeado por un tronco. Añadió que de pronto una ola de más de un metro de alto hundió la embarcación.

“Ayudé a los que pude, pedí auxilio y los vecinos de Baltimore acudieron en nuestro auxilio”, explicó Castillo.
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Xiomara Martínez, sobreviviente, dijo que  el capitán al notar que la lancha se hundía entregó chalecos salvavidas a los pasajeros, pero algunos no lograron colocárselos, entre ellos los desaparecidos.

Añadió que durante 30 minutos vivieron momentos de terror, debido a que la ayuda no llegaba y el mar estaba turbulento.