El mayor reto, no rezago, es minimizar los tiempos que dura todo el proceso judicial, desde la etapa de investigación, todas las etapas judiciales y el debate. Pero quiero ser claro, esto es interinstitucional, es un reto que seguimos teniendo todas las instituciones del sector justicia.

¿Cuál es el mayor avance en la actual gestión del MP?

La atención a las víctimas, que ahora es especializada. La búsqueda de ampliar la cobertura a más municipios y la especialización que se da, de acuerdo con los tipos penales que se investigan actualmente, algo que antes no existía.

¿Cuál es el mayor desafío que tiene el MP?

El desafío principal es seguir alcanzando la mayor cantidad de municipios con cobertura y tener presencia. Actualmente solo hay de 10 a 12 por ciento de presencia a nivel nacional.

¿Qué trabajo del MP merece continuidad?

Hay una política de persecución penal que ya dejó planteados varios ejes, como el fortalecimiento a la investigación, el trabajo de atención a víctimas y grupos vulnerables, el tema de acceso a la justicia, y creo que esos aspectos que han sido relevantes en esta administración necesitan continuidad. Una de mis principales actividades sería seguir avanzando y seguir consolidando lo que hoy tenemos en el MP.

¿No hay nada que usted quisiera cambiar?

En el tiempo que tengo dentro de la institución he ido visualizando todos y cada uno de esos procesos, y uno de los aspectos que tengo claro, y es parte de mis retos, es ir creciendo, tener la cobertura y alcanzar la profesionalización que estamos buscando para el MP, y ese no es un reto, es una constante.

¿Cómo puede aportar el Ministerio de Gobernación para fortalecer la investigación criminal?

La relación entre el Ministerio de Gobernación y el MP ha sido buena. En los distintos procesos se  ha afianzado mucho el trabajo interinstitucional, recordemos que la responsabilidad de investigación criminal la tiene el fiscal, que se apoya en los distintos cuerpos de investigación que existen en el país y es donde surge la relación efectiva. Ese trabajo, armonía y coordinación que se ha tenido debe mantenerse y superarse.

Su cercanía al MP y a la actual fiscal es criticada por grupos opositores. ¿Cómo garantiza su independencia de criterio y acción?

Desde que tomé la decisión de participar en este proceso de postulación fue personal. Es un reto y era un asunto pendiente en mi carrera profesional e institucional.

Se me da la oportunidad de trabajar en esta administración y encuentro el momento, que considero es bueno —para participar—, después de 18 años de estar —en la institución—. Mi  trabajo y los resultados que se pudieran observar, en el momento de estar en el cargo, darían la razón o no a las personas que puedan estar manifestando esto.

¿Cómo evalúa la relación de la Cicig y el MP durante los últimos tres años?

Es efectiva, se ha consolidado, se ha mejorado el trabajo. Recordemos que es uno de los mandatos. Esa experiencia ha ido dando frutos y se ha institucionalizado todo un mecanismo de investigación que se ha ido transfiriendo poco a poco, conforme las posibilidades, a personal de la Fiscalía.

¿Cuál sería el papel de la Cicig durante su gestión?

El que ha estado desarrollando hasta el momento, que es coadyuvar, que es un mandato internacional aceptado por Guatemala.

¿Qué capacidades necesita el MP para ya no depender de la Cicig?

Capacidades ya hay, la transferencia de experiencias ha dado buenos resultados y continuar en esa misma línea va a dar esa pauta de poder mejorar el trabajo.

¿Se debería trabajar la investigación conjunta con la Policía Nacional Civil?
Realizar un trabajo similar no. Hay autonomía propia de las instituciones.

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