De acuerdo con la Fiscalía, traficantes de personas exigieron a algunas de las víctimas el teléfono de familiares en Guatemala o Estados Unidos, a fin de exigirles el pago de un rescate a cambio de su libertad.
Decenas de miles de migrantes centroamericanos entran cada año a México por la frontera con Guatemala con el propósito de llegar hasta Estados Unidos.
En el trayecto son frecuentemente víctimas de extorsiones, robos y asesinatos o son abandonados en camiones o sitios inhóspitos por los mismos “coyotes” (traficantes) a los que les pagan por el traslado.
Más de 10 mil menores guatemaltecos están en centros del ICE por ser migrantes no acompañados. https://t.co/oMLtADjjs8 @prensa_libre
— Roni Pocón (@rpocon) August 2, 2017
El lunes fueron detenidos en la ciudad chiapaneca de Tapachula, fronteriza con Guatemala, dos presuntos pandilleros del grupo MS-13 que estaban acusados de golpear y despojar de dinero, un teléfono y un reloj a un migrante hondureño en abril de 2015.
El hondureño declaró que había sido asaltado con cuchillos y machetes y amenazado de muerte si presentaba la denuncia.
