Mynor de la Cruz, vecino de dicha colonia, explicó que en la actualidad unos 12 niños reciben clases en una galera, que fue construida por los padres de familia con el objetivo de que sus hijos no se queden sin estudiar este año, ya que el establecimiento más cercano está a dos kilómetros.

Señaló que unos 40 niños necesitan asistir a la escuela, por lo que se acordó la construcción de la galera, a pesar de que no cuenta con los servicios básicos.

Sonia Pineda, madre de familia, argumentó que las clases comenzaron el día que el Gobierno estableció —16 de enero— y que tenían la esperanza de que el Ministerio de Educación les autorizara la escuela y algunos maestros; sin embargo, eso no ocurrió, por lo que el futuro de sus hijos es incierto.

No autorizada

De acuerdo con Pineda, la escuela es atendida por una maestra que tampoco está autorizada, por lo que temen que sus esfuerzos sean en vano y que los niños de párvulos y primaria sean afectados, pues sueñan con continuar sus estudios, pese a las incomodidades que representa aprender en una galera.

Adrián Esquivel, coordinador de primaria de la Dirección Departamental de Educación, refirió que la escuela no está autorizada porque no cuentan con los documentos necesarios.

Añadió que visitará el lugar para explicarle a los vecinos cuáles son los procedimientos para autorizar una escuela, la cual debe reunir algunas características que garanticen la seguridad de los niños y los maestros.