El 16 de diciembre de 1955 daba inicio el concurso del nacimiento del primer niño que naciera el 1 de enero de cada año y se le premiaría con dinero en efectivo que otorgaba Prensa Libre. Este simpático concurso dijeron sus organizadores que podría llamarse “La Maratón de la Cigüeña” pero en justicia se debía llamar “El Primer Niño del Año”.
En este concurso podían participar todos los niños que nacieran a partir de las 24 horas del 31 de diciembre, en la ciudad capital, en casas particulares, en casas de salud, en hospitales y maternidades siempre que fuera con auxilio de médicos o una comadrona titulada.
Los médicos y comadronas que asistieran los partos debían de dejar una constancia firmada y con testigos que presenciaran el alumbramiento del bebé, esto era para llenar los requisitos de validez del concurso.
Esto no se trata de una idea original, sino de recoger con este concurso una idea simpática y generosa a la vez y que en otros países había tenido gran éxito, precisamente porqu el hecho de nacer con los primeros minutos del primer día del año se convertiría en una especie de buena estrella.
Primer donativo
El doctor Luis Velásquez fue el primero en dar su donativo en 1955, el cual consistió en 45 días de atención médica gratuita para el niño que resultara premiado en el concurso destinado en poner en apuros a la cigüeña.
Las muchachas guías fueron otras que se sumaron al concurso y comenzaron a colaborar con Prensa Libre para distribuir los formularios del concurso en hospitales, casas de salud, maternidades y las comadronas, ellas también se ofrecieron a recoger dichos formularios que estableciera que niño nacido primero el día primero de enero.
3 de enero de 1956
El primer premio del concurso del maratón de la cigüeña le fue otorgado a la señora Zoila Escobar de García, madre de Carlos García Escobar , quien nació a las cero horas con veinticinco segundos del primer día 1956, en el Centro de Maternidad del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS)
Ese año también se premió como segundo lugar al bebé Carlos Alberto Rodríguez, quien nació a las cero horas con cincuenta minutos en el Hospital Roosevelt, y los dos el terceros lugares fueron para Mirian Ninnette Pérez Ortega y Francisco Roberto Ford Salguero, quienes nacieron a las cero horas con un minuto.
3 de enero de 1957
El ganador del concurso del niño del año en su segunda edición fue para el niño con el nombre de Victor Hugo, hijo de Rosalina Aguilar Mazariegos.
Víctor nació en los primeros segundos de 1957 en el Centro Materno Infantil del IGSS pesando 6 libra y 9 onzas; los testigos del alumbramiento fueron el doctor Germán Aramburú y la enfermera Guadalupe Gutiérrez.
El premio que Prensa Libre dio fue un cheque por valor de Q100.00, entregado por Pedro Julio García. También se le entregó un par de zapatitos donados por la Zapatería La Equitativa, un vale por 25 paquetes de cereales, obsequiado por la tienda Sampedrana, un vale por una sombrilla y un cincho donado por la fábrica Azuri, y una tarjeta de Odilia de Castillo Armas, primera dama de la nación, quien también les obsequió un regalo.
Bases del concurso
El 20 de diciembre 1956 Prensa Libre dio a conocer las bases para poder participar en El Maratón de la Cigüeña, y así premiar al afortunado niño que naciera en los primeros segundos del nuevo año.
Esta Casa editora entregaría un premio en efectivo a los padres del Primer Niño del Año, para que su nacimiento al mundo fuera bajo una estrella propicia de ilusiones y sueños.
Contreras Vélez dijo que esperaba, como el año anterior, que personas altruista contribuyeran y colaboraran para llevar la felicidad a un hogar guatemalteco.
Requisitos
1- Se hará acreedor al premio del Niño del Año, al primero que nazca a partir de la última campanada de las 24 horas del día 31 de diciembre, en los hospitales, centros asistenciales de la capital o en casas particulares, siempre que concurran a los sitos que se detallan en los artículos subsiguientes.
2o- Comprobación de la hora del nacimiento, será requisito indispensable que se presente una certificación firmada por el médico o enfermera titulada que haya asistido el parto. Deberá concurrir también el testimonio de tres testigos honorables, sin ningún parentesco con los padres del niño concursante. Prensa Libre se reserva el derecho de comprobar estos extremos.
3o- Una comisión nombrada por Prensa Libre se encargará de investigar los alumbramientos acaecidos dentro del término de este concurso, en los hospitales y centros asistenciales del estado. Los partos registrados en casas particulares, deberán ser reportados a PRENSA LIBRE a más tardar el día 2 de enero a las 12 horas acompañando la certificación y testimonio de testigos a que se refiere el artículo segundo.
4o- La misma comisión anterior será la que determine a quién corresponde el premio del Niño del Año. Su fallo será inapelable.
5o- Prensa Libre ruega y encarece la cooperación del cuerpo médico de la capital, así como de las enfermeras o comadronas tituladas, para que extiendan la certificación de que trata el artículo segundo, a pedido de los interesados, ya que esa es la base del concurso. Sin esa certificación sería imposible llevarlo a efecto, sin estar expuesto al engaño y a la impostura.
6o- Prensa Libre entregará a los padres del niño o niña del año, un premio en efectivo y deja abierta a la generosidad del pueblo guatemalteco, la oportunidad de sumar sus regalos o donativos de cualquier clase al ganador del concurso.
7o- La entrega del premio y regalos al primer Niño del Año, se hará en un acto especial en los primeros días de enero.
El 2 de enero 2016 el concurso del niño del año arribó al sesenta aniversario. Esta noble causa consiste en proporcionar una ayuda a las madres de escasos recursos con donaciones de casas comerciales y personas de bien corazón.
