Hemeroteca

El mes en el que nacieron dos dictadores

¿Coincidencia o destino? noviembre vio nacer a dos presidentes cuyos sistemas de gobierno se asemejan, lo cual se refleja en la autocracia, la concentración de poder y decisiones individuales. 

Sello de 1917 donde aparece retratado el presidente Manuel Estrada Cabrera. (Foto: Hemeroteca PL)

Sello de 1917 donde aparece retratado el presidente Manuel Estrada Cabrera. (Foto: Hemeroteca PL)

Ellos son Manuel Estrada Cabrera, quien gobernó el país de 1898 a 1920, y Jorge Ubico Castañeda, de 1931 a 1944, ambos con repetidas reelecciones, un afán por la monumentalidad y una intransigencia que llegó a segar vidas.

El 21 de noviembre de 1854 nace Manuel Estrada Cabrera en Quetzaltenango, y se distingue como estudiante brillante. Era de escasos recursos, por lo cual era víctima de acoso de compañeros adinerados.

El escritor Rafael Arévalo Martínez cuenta en la obra biográfica Ecce Pericles que una vez la madre de Estrada Cabrera fue acusada falsamente de haber robado unas joyas en una casa, por lo que fue a prisión. Ello, a juicio del historiador Manuel Valladares, se fue convirtiendo en rencor y resentimiento en el futuro dictador.

En 1892, ya hecho un abogado, el presidente José María Reyna Barrios lo integra a su gabinete. Este mandatario es asesinado el 8 de febrero de 1898, en extrañas circunstancias, y esa misma noche Estrada Cabrera se presenta al Palacio de Gobierno y le dice al pleno de ministros: “Señores, háganme favor de firmar este decreto. Como primer designado, me corresponde la Presidencia”, cuenta el historiador Federico Hernández de León.

El 9 de febrero amanece como presidente y su primer decreto es abrir ciertas escuelas, pero según Augusto Cazali, en Historia de la USAC 1821-1994, con esas medidas solo buscaba “granjearse la voluntad ciudadana”.

Conforme avanza el tiempo el aparato represivo de Estrada Cabrera cerró las posibilidades de oposición política. Se forma una maraña de delatores y espías, por afinidad política o simple servilismo. Tenía ojos y oídos en cualquier parte, una práctica que ya habían ejercido dictadores anteriores como Rafael Carrera o Justo Rufino Barrios.

Mediante fraudes logra ser “reelecto” en 1905 y el descontento crece. Sobrevive a un atentado con bomba en 1907. En 1908 un cadete de la Escuela Politécnica le dispara, pero la bala solo lo hiere en un dedo, pues casualmente en aquel instante apartó con la mano la bandera bajo la cual pasaba. El mismo Estrada Cabrera le contaría a uno de sus carceleros luego de su derrocamiento, en 1920, que hubo seis atentados en total. Tras cada susto iba a la cacería de sospechosos. Los juicios eran sumarios y los fusilamientos, inminentes.

Paradójicamente quería ser visto como el amigo de la infancia y promotor de la cultura. En noviembre, mes de su natalilicio, organizaba las Minervalias, fiestas dedicadas a la diosa griega de la sabiduría. Escritores como Enrique Gómez Carrillo o Rafael Arévalo Martínez redactaron discursos elogiosos para el “Benemérito de la Patria”, que también se reelige en 1911 y 1917 por ingentes cantidades de votos que llegaban a superar a la población apta para sufragar.

No obstante, las secuelas del terremoto ocurrido ese año y la crisis económica le pasan la factura. Además, el movimiento de ciudadanos descontentos va en aumento y finalmente, el 8 de abril de 1920, se le declara mentalmente incapaz para ejercer el cargo. Es separado y va preso. Muere en 1924.

Como dato final cabe agregar que en su gobierno figuró como ministro de Fomento un militar llamado Jorge Ubico Castañeda.

Otro hijo de noviembre

Nacido el 10 de noviembre de 1878, Jorge Ubico estudia sus primeros años en Europa y México, debido a la carrera diplomática de su padre. Después vuelve a Guatemala, donde permanece por un par de años en la Escuela Politécnica pero no concluye sus estudios. En 1897 consigue despachos oficiales mediante “conexiones”.

En 1906, el teniente coronel Ubico, que se había casado en 1905 con doña Marta Lainfiesta, participa en la llamada “Guerra del Totoposte”, que enfrentó a Guatemala con El Salvador.

La fortuna favoreció a las armas guatemaltecas. Condecorado y ascendido a coronel ese mismo año de 1906, Ubico es nombrado por el presidente Estrada Cabrera jefe político y comandante de armas de Alta Verapaz (1907-1911) y Retalhuleu (1911-1919), puestos que le sirven para adquirir conocimientos en el ámbito de la administración pública y en los que demuestra su eficacia como funcionario, destacándose en Retalhuleu por haber perseguido a las bandas de delincuentes y dirigido la campaña contra la fiebre amarilla y la gripe española.

Ya ascendido a general de Brigada, es llamado a Guatemala como miembro de la Comisión de Guerra de la Asamblea Nacional Legislativa.

Camino al poder

Tras la caída del presidente Estrada Cabrera, en 1920, llega el efímero gobierno unionista, que es derrocado por un golpe militar, un año después.

El general golpista José María Orellana ocupa la Presidencia hasta su muerte, en 1926. El general Ubico ocupa el cargo de ministro de Guerra, de 1921 a 1922, cuando, ya general de División, es nombrado primer designado a la Presidencia.

En 1926 se celebran elecciones para presidente, y Ubico participa por primera vez, pero es derrotado por el general Lázaro Chacón. De esta época data la organización de sus partidarios en células de cinco personas. La numerología de moda en esa época había identificado la causa ubiquista con el número cinco, por la cantidad de letras de su nombre y las de su apellido.

Sus partidarios llevaban un botón en la solapa con el número cinco, y a don Jorge se le empieza a conocer como el Señor Veinticinco. Tras la enfermedad que conduce a la renuncia y posterior fallecimiento del general Chacón, en 1930, se da un período de inestabilidad que concluye mediante otro proceso electoral, del cual sale vencedor Ubico, candidato del Partido Liberal Progresista, quien toma posesión de la Presidencia de la República el 14 de febrero de 1931.

Resulta complejo analizar el gobierno del general Ubico. No cabe duda de que tuvo aspectos positivos de los cuales nuestros abuelos nos han contado, tales como la honradez que imperó durante todo su mandato —promulgó la Ley de Probidad— y el orden que se logró en la Hacienda Pública —gracias a lo cual Guatemala se vio libre de la crisis económica que imperaba a escala mundial—. Desde el inicio de su mandato dio a entender que no habría contemplaciones con los criminales, pero aprovechó eso para hacer caer a rivales políticos.

Emprendía giras para recorrer todo el territorio nacional. Una comitiva de contadores de glosa precedía la comitiva presidencial para corroborar que se llevaban bien las cuentas de la administración de los departamentos respectivos.

Simpatizante de los indígenas a la manera paternalista de la época, tomó medidas para redimirlos legalmente de la servidumbre a la que habían estado reducidos, pero usó la Ley contra la Vagancia para explotarlos.

En 1936 fue creada la Orden del Quetzal, que Ubico ostentó en el grado de Gran Collar. El Gobierno de Guatemala, en el contexto de la Guerra Civil Española, se apresuró a reconocer al Gobierno de Burgos, encabezado por el general Francisco Franco.

Aunque Ubico tenía personales simpatías por la Alemania nacionalsocialista y por la Italia fascista, su mentalidad pragmática hizo que, en el momento de ser atacada la base de los Estados Unidos en Pearl Harbor (Hawai) por los japoneses, el 7 de diciembre de 1941, no pasaran muchos días sin que Guatemala declarara la guerra a las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón).

La feria de la capital se trasladó de agosto a noviembre, para que coincidiera con el cumpleaños del presidente, y se construyeron varios edificios para el efecto en La Aurora, que hoy son museos.

Además de la leyenda de ser una época en que el crimen era castigado con severidad, el régimen de Jorge Ubico dejó cuantiosa obra pública que aún se conserva. Por ejemplo están edificios como la Dirección de Sanidad, la antigua Aduana, el Palacio de Correos, el antiguo aeropuerto, la Dirección General de la Policía y, sobre todo, el Palacio Nacional, inaugurado con ocasión del cumpleaños del mandatario, el 10 de Noviembre de 1943. Así también hay numerosos puentes que resisten al paso del tiempo por la buena calidad de la obra.


Las sombras

El primer período presidencial del general Ubico duró hasta 1937 y es considerado como positivo. No obstante, la camarilla que lo rodeaba le hizo creer que contaba con el respaldo irrestricto de la población, y ello causó que se preparara su primera reelección y se dejara en suspenso el artículo constitucional que lo prohibía. En el segundo período, que se extendió hasta 1943, ya hubo mayor presencia del control, de la delación y de la represión.

Por medio del expediente de la Ley Fuga la escolta que acompañaba a un reo podía disparar contra este y afirmar que este había intentado fugarse.

Ubico gobernó el país sin admitir oposición alguna. No obstante, al comenzar la retirada de las Potencias del Eje en la Segunda Guerra Mundial y perfilarse el posible triunfo de las democracias, los sectores guatemaltecos no afines al régimen comenzaron a organizarse y a manifestar su descontento.

Iniciados los movimientos populares y las manifestaciones en 1944, que fueron reprimidas por la Caballería, y al darse cuenta el presidente de que se pedía su renuncia y del memorial que se le dirigió —denominado Memorial de los 311, por el número de firmas que lo calzaban—, en el cual se le pedía que restableciera las garantías constitucionales que acababa de suspender, entre las que figuraba la de su amigo el doctor Mario Wunderlich, decidió dimitir y retirarse a su casa, que todavía existe, en la 14 calle, entre 3a. y 4a. avenidas de la zona 1. Era el 1 de julio de 1944.

El general Ubico se asiló en la Legación de Inglaterra y salió de Guatemala hacia el exilio. Se dirigió a Nueva Orleáns, donde falleció el 14 de junio de 1946. Sus restos fueron repatriados en 1963 y reposan en el panteón familiar del Cementerio General.

Legado

El presidente Estrada Cabrera estableció instituciones de beneficencia, tales como el Asilo de Maternidad Joaquina —denominado así en honor de su madre—, ubicado donde después estuvo el antiguo Hospital Militar y el Asilo de Convalecientes Estrada Cabrera, situado en la Avenida de la Reforma, donde hoy están los ministerios de Educación y de Relaciones Exteriores.

El asilo que funciona junto al Hospital de Traumatología y Ortopedia Dr. Jorge von Ahn, en la zona 1, también data de esa época. En sus jardines existe todavía el busto de Doña Joaquina.

El abogado

El 21 de noviembre de 1854 nació Manuel Estrada Cabrera, hijo de Pedro Estrada y Joaquina Cabrera. De niño trabajó en una carpintería y gracias a un jesuita asistió al colegio San José, donde fue estudiante destacado. Se graduó de abogado en 1881 y curiosamente recibió el título de manos del dictador Justo Rufino Barrios.

Su carrera fue ascendente: lo nombraron Juez y después jefe político de Retalhuleu; decano de Derecho de Occidente y, en 1891, fue electo alcalde de Quetzaltenango.En 1892, el presidente José María Reyna Barrios, para congraciarse con la región de Los Altos, decidió incluir en su gabinete a un profesional oriundo de esa región: Manuel Estrada Cabrera, a quien los círculos políticos capitalinos veían como un total desconocido.

El militar

El 10 de noviembre de 1878 nació en la ciudad de Guatemala Jorge Ubico, hijo del licenciado Arturo Ubico y Matilde Castañeda. Su padrino fue el presidente, general Justo Rufino Barrios.

Estudió sus primeros años en Europa y después en entidades privadas. También estudió en el Instituto Nacional Central para Varones y encaminó sus pasos a la Escuela Politécnica, pues deseaba ser militar.No obstante, solo estuvo en la Academia Militar dos años.

Se colocó en el Banco de Guatemala. Fue hasta algún tiempo después, en 1897, por influencias familiares, que consiguió los despachos de subteniente del Ejército. Ese año fue ayudante del general Francisco A. Villela en la campaña contra los revolucionarios que habían invadido el territorio nacional en Huehuetenango, y fue ascendido a teniente. Capitán en 1900, mayor en 1901, en 1903 fue ascendido a teniente coronel.

 

ESCRITO POR: