El origen del incendio según la información publicada en Prensa Libre fue por una veladora encendida que se cayó en el interior de un puesto a eso de la medianoche. En consecuencia fueron consumidos los puestos que se ubicaban en la 18 calle y 5a. avenida, donde elementos particulares, policía militar y nacional, ayudaban a los propietarios a sacar parte de la mercadería, frutas y otros objetos que allí se expendían.

Prácticamente una cuarta parte de este céntrico mercado, de los puestos 122 al 132 quedaron destrozados por las grandes lenguas de fuego que se elevaban al cielo. Numerosas personas que en ese momento salían de los cines capitalinos se aglomeraron alrededor del lugar del siniestro, muchos de ellos para colaborar en su extinción y otros para ayudar a los propietarios a extraer la mercadería que aún podía salvarse.

En la parte interior del mercado también fueron consumidos más o menos diez puestos comerciales y muchos de sus propietarios, con lágrimas en los ojos lamentaban esta nueva tragedia.

Casi toda la banqueta frontal del lado de la 18 calle se encontraba llena de mercadería que se logró salvar del siniestro, gracias a la angustiosa lucha que los propietarios de la misma sostuvieron con el fuego que abrasaba en forma rápida cuanto encontraba a su paso. Una multitud de curiosos que entorpecía considerablemente el trabajo de los bomberos y la policía saturó en forma impresionante los alrededores de la “placita quemada”.

Mientras los propietarios trabajaban desesperadamente de salvar su mercadería, personas inescrupulosas incursionaban en distintos puntos con miras de robo. La Policía Nacional detuvo a varios aprovechados conduciéndolos al Primer Cuerpo policial.

El presidente Miguel Ydígoras Fuentes indicó que el gobierno ayudaría a las víctimas del incendio. “Para algo está el fondo para calamidades públicas, aunque se encuentra algo exhausto, vamos a ayudarles con lo que se pueda” indicó el mandatario.  Ydígoras se presentó al lugar del incendio a las 11.45 horas acompañado del ministro de la defensa nacional. Ambos dieron órdenes para que se evitara el saqueo de parte de los amigos de lo ajeno.

Además del mandatario, los candidatos a Alcalde de la capital, Armando Diéguez Pilón y Ramiro Samayoa acudieron a la placita quemada para prestar ayuda, en caso de que fuera necesaria. Diéguez Pilón indicó a la prensa que sentía pena por lo ocurrido y expresó sus deseos para que las autoridades encontraran una forma adecuada de ayuda para los damnificados. En el incidente no se lamentaron víctimas.