Los residentes también denunciaron el abandono en que se encuentran por parte de las comunas y el Gobierno central, ya que carecen de energía eléctrica, drenajes, cobertura en salud y educación, entre otros servicios.
El vecino Felipe Bravo dijo que apoyan a las empresas porque es una manera de desarrollo para esa zona fronteriza, y rechazó las acciones violentas que ejercen grupos ajenos a esa área. “Buscamos la paz y queremos que los proyectos se hagan, ya que es nuestra única esperanza para salir adelante”, indicó.