Las quejas
Antonio Gerónimo, originario de San Rafael Petzal, explicó que los empleados del Inacif le pidieron que comprara veneno para moscas y zancudos, y si no lo hacía no le entregarían el cadáver de un pariente.
“Lo que me indignó es que somos personas de escasos recursos y hacer esos gastos nos afecta. Además, el Inacif no debería cobrar por su trabajo”, dijo.
Santos García, otro afectado, indicó que es originario de La Democracia y que el Ministerio Público (MP) envió el cuerpo de un pariente a la morgue y que les afirmaron que en pocas horas se los devolverían, pero pasaron 12 horas.
Pedro Cano, de ese municipio, relató que su hijo murió en La Mesilla, a las 23 horas, pero como el horario no permite necropsias a esa hora tuvieron que esperar hasta pasadas las 14 horas para que les dieran el cuerpo.
Señaló que nadie en el Inacif da información de horarios o la forma de trabajar, por lo que muchas personas pernoctan afuera de la morgue, pese a las inclemencias del tiempo.
Flora Azucena Gaspar Diego, de 23 años, murió en el caserío Naranjo, aldea Melco, Santa Cruz Barillas, a unas 10 horas de la cabecera, y pese a que el MP coordinó para que se agilizara la necropsia, esta se practicó 15 horas después de que el cuerpo fue ingresado en la morgue.
Autoridades opinan
Marvin Montejo, fiscal distrital del MP en Santa Eulalia, lamentó la tardanza del personal del Inacif, pues si ocurre una muerte el martes, entregan el cuerpo hasta el jueves.
“Hay una normativa o protocolo, pero si eso es lo que prevalece deja mucho que desear, porque los operadores de justicia deben atender las necesidades de la población, principalmente cuando es gente humilde que viene de comunidades lejanas”, refirió Montejo.
Subrayó que es necesario reformar los protocolos, para brindar atención más ágil.
“Creemos que el lado humano del funcionario debería prevalecer para dar un servicio de calidad en casos tan lamentables como el de Barillas”, expresó.
Érick Villatoro, auxiliar departamental de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), se mostró indignado por las quejas de usuarios del Inacif.
Aseguró que la PDH, de oficio, tiene tres expedientes abiertos por mal servicio en el Inacif, pero que existe un subregistro, ya que muchas personas prefieren no denunciar.
Villatoro expuso que se debe analizar el problema para hacer mejoras, pues Huehuetenango es uno de los departamentos con mayor cantidad de muertes por distintas razones y no es válido el criterio que tienen autoridades del Inacif en cuestión de horario.
Además, denunció que se le da prioridad a casos de alto impacto, como víctimas del crimen organizado, hijos de funcionarios o personas adineradas.
“Para cualquier ciudadano al que le maten a un familiar es un hecho trascendental y debe tener la misma atención”, expresó Villatoro.
Recordó que el Organismo Judicial daba mejor servicio cuando tenía la morgue a su cargo, porque a pesar de que no tenía instalaciones modernas, atendía las 24 horas.
El gobernador de Huehuetenango, Juan Antonio Solórzano, dijo que preocupa esta situación porque es un servicio que presta el Estado y debe ser el mejor para la población, por lo cual coordinarán para tratar que la atención mejore.
Por presupuesto
Roberto Garza, jefe de la Unidad de Información Pública del Inacif, dijo que por presupuesto y seguridad de los empleados no pueden ampliar el horario.
Afirmó que trabajan lo más rápido posible durante la jornada.
Explicó que investigarán la petición de insumos a los parientes, pues el Inacif tiene contratada una empresa de limpieza.
