El jefe del grupo parlamentario del GERB, Krasimir Velchev, dijo ayer que sus diputados votarán a favor de la moción, apoyada por otros dos partidos, lo que eleva a 194 los votos en contra del ejecutivo.
El dirigente oficialista confirmó que la presión callejera ha causado la dimisión del gabinete de Borisov, un exkarateca y exguardaespaldas, apodado en Bulgaria como Batman.
La tensión se había agravado en las últimas horas. En Sofía, 28 personas, entre ellas cinco policías, resultaron heridas y dejaron decenas de capturados.
Ahora, el presidente búlgaro, Rosen Plevneliev, deberá encargar la formación del nuevo gobierno, pero ante las diferencias partidistas se avizoran comicios que podrían celebrarse a finales de abril.
A pesar del anuncio de dimisión de Borisov, las protestas callejeras no han cesado, con varios miles de manifestantes en la capital Sofía y en Varna, la segunda ciudad del país.
El salario medio ronda los 350 mensuales y las pensiones no llegan ni siquiera a los 100 al mes, con lo que Bulgaria ocupa junto con la vecina Rumanía las últimas posiciones entre los 27 países miembros de la Unión Europea.