Según el Observatorio, los radicales han raptado también a decenas de civiles asirios en la localidad de Tal Hurmuz, próxima a Tal Shamiram, adonde se había desplazado un gran número de personas huyendo de la violencia.
Por otro lado, el EI ejecutó a dos civiles en el pueblo de Guibish, también en Al Hasaka, acusados de colaborar con los efectivos kurdos sirios.
En Al Hasaka habita la mayor parte de los asirios de Siria, un grupo étnico de mayoría cristiana, que también vive en Irak y Turquía.
Antes del inicio del conflicto, en marzo de 2011, había unos 120 mil asirios en Al Hasaka, de los que la mayoría ha escapado a países vecinos de Siria.
El secuestro de los asirios coincide con una ofensiva de las Unidades de Protección del Pueblo -milicias kurdo sirias- para arrebatar al EI zonas ricas en petróleo y gas de Al Hasaka.
Los choques se concentran en áreas que abarcan desde la periferia sureña de la ciudad de Qameshli hasta la frontera con Irak, así como en las inmediaciones de Tal Tamr.