Internacional

Irán y grandes potencias tratan de impulsar negociaciones nucleares

Irán y las grandes potencias comenzaron este viernes en Kazajistán una nueva ronda de conversaciones sobre el programa nuclear iraní con el objetivo de hacer progresar las negociaciones, que se anuncian difíciles.

La mesa de negociación entre Irán y las grandes potencias, este viernes en Almaty, Kazajistán. (Foto Prensa Libre: AFP)

La mesa de negociación entre Irán y las grandes potencias, este viernes en Almaty, Kazajistán. (Foto Prensa Libre: AFP)

ALMATY.- Los países del llamado Grupo 5+1 (EE. UU., Francia, Gran Bretaña, Rusia, China y Alemania) e Irán empezaron “la sesión plenaria” en un hotel de Almaty, la ciudad más importante de Kazajistán.

“Esperamos que los iraníes regresen con una respuesta clara y concreta a nuestra propuesta” hecha en la anterior reunión de Almaty a finales de febrero, declaró Michael Mann, portavoz de la Alta Representante de la Unión Europea, Catherine Ashton, que dirige las negociaciones por el Grupo 5+1.

Pero el principal negociador iraní, Said Jalili, hizo saber el jueves que Irán no tiene la intención de hacer concesiones sobre su derecho a enriquecer uranio. “Pensamos que pueden abrir las negociaciones por una frase reconociendo a Irán el derecho a enriquecer” uranio, había declarado Jalili.

El Grupo 5+1 pidió a Irán que cierre su planta de enriquecimiento de Fordo, considerada como la única del país a salvo de un ataque militar, y que envíe sus reservas de uranio enriquecido a 20% al extranjero.

En la anterior reunión, los países del Grupo 5+1 habían presentado una nueva oferta a Teherán que preveía la “suspensión” en vez del “cese” de las actividades de enriquecimiento de uranio a 20% en Irán.

A cambio proponían atenuar ciertas sanciones sobre el comercio del oro y el sector petroquímico, que ahorcan la economía iraní. Un alto responsable estadounidense sostuvo el jueves que esta propuesta era “equilibrada y muy equitativa”.

Las grandes potencias esperan de Irán una “respuesta concreta y sustancial”, había agregado este responsable. Las resoluciones de la ONU que sancionan a Irán por su programa nuclear fueron reforzadas unilateralmente por un embargo bancario y petrolero de la Unión Europea (UE) y de EE. UU.

Las potencias occidentales e Israel sospechan que Irán busca fabricar el arma atómica, posibilidad que Teherán desmiente categóricamente.

Jalili pareció el jueves minimizar la posibilidad de mantener un encuentro bilateral con su homóloga de Estados Unidos, la subsecretaria de Estado Wendy Sherman. Washington espera desde hace años un diálogo directo.

“Lo que nuestra nación espera, es que EE. UU. corrija su comportamiento, y no sólo con palabras. Los que vienen por negociaciones deben venir con esa lógica, y no con amenazas diciendo que todas las opciones están sobre la mesa. Ello contradice el buen sentido”, subrayó Jalili.

El portavoz de la UE indicó el viernes que una decisión sobre este tema será tomada a medida de que las negociaciones avancen. Rechazó además expresarse sobre la eventualidad de una cena el viernes entre Ashton y Jalili.

Ashton se declaró “prudentemente optimista” sobre el resultado del nuevo encuentro previsto hasta el sábado. Por su lado, el adjunto de Jalili, Alí Bagheri, prometió esfuerzos de Irán en la búsqueda de una solución en Almaty. “Iniciamos negociaciones con propuestas específicas y que abren el camino” a una solución, declaró.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, estimó el jueves que Irán debe “demostrar su sinceridad” a la comunidad internacional y “probar que su programa nuclear sólo se desarrolla con fines pacíficos”. Los expertos estiman que un avance en las discusiones es poco probable antes de la elección presidencial del 14 de junio en Irán, a la que el presidente Mahmud Ahmadinejad no puede presentarse tras dos mandatos consecutivos.