“Esta red operaba desde varios estados del país y para ello utilizaba varias empresas y personas naturales que servían como fachada, las cuales legitimaban estas divisas a través de los mercados ilegales, convirtiéndolos en bolívares e introduciéndolos en el sistema económico nacional”, explicó el ministro venezolano.
El Aissami detalló que la “principal cabecilla” de esta organización, María Soraya Caliman, es “secretaria del partido de oposición” Proyecto Venezuela, en Caracas, y “persona de confianza de la familia” del actual gobernador de Carabobo, Henrique Salas Feo, líder de esa misma agrupación política.
El ministro también señaló como involucrado al abogado José Manuel Salas, “vinculado a la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD)”, y quien supuestamente “recibía dinero en bolívares y entregaba dólares provenientes de EE. UU. y Colombia”.
Igualmente apuntó que una de las empresas involucradas en el entramado es “contratista” del Estado Nueva Esparta, donde es gobernador el opositor Morel Rodríguez; otra “está vinculada en actos de apoyo y financiamiento de la MUD en el Estado Bolívar”, y una tercera “está vinculada a un partido de la MUD en el Estado Táchira”.
Según el ministro venezolano, la red estaba comprometida para lavar US$2 millones, aunque hay evidencias de que los comprometen a operaciones que suman un monto superior a US$10 millones, por lo que aún se está determinando la cantidad de dinero blanqueado.