Internacional

El viacrucis del migrante enfrenta a México y Estados Unidos 

El Gobierno de México rechazó el lunes que promueva la migración ilegal y reiteró su compromiso de trabajar de manera conjunta con otras naciones para atender el fenómeno migratorio en la región, luego de las críticas del presidente Donald Trump. 

“Bajo ninguna circunstancia, el gobierno de México promueve la migración irregular”, señalaron las secretarías de Gobernación (SG) y Relaciones Exteriores (SRE) luego de que el presidente estadounidense Donald Trump exigiera que este país afinara sus controles y frenara el flujo de migrantes que va a esa nación.

México se mantiene activo en los mecanismos internacionales apropiados para dar una mejor atención del fenómeno migratorio, como “la Conferencia Regional de Migración” donde participan Estados Unidos, y naciones de Centroamérica, precisaron las autoridades en un comunicado.

Los ministerios mexicanos aseguraron que desde el pasado 25 de marzo se ha mantenido informado a Estados Unidos sobre el desarrollo de la caravana “Viacrucis del Migrante” a través de la embajada estadounidense en México.

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México considera que la caravana es “una manifestación pública” que pretende llamar la atención sobre este fenómeno y sobre la importancia del respeto de los derechos humanos de los migrantes centroamericanos que buscan mejores oportunidades o refugio.

La caravana se encuentra formada principalmente por migrantes provenientes de los países del llamado Triángulo Norte de Centroamérica, Guatemala, Honduras y El Salvador.

Las autoridades mexicanas informaron que por haber ingresado al país sin cumplir los requisitos de ley, estos migrantes de la caravana se encuentran sujetos a un procedimiento migratoria administrativo.

“Alrededor de 400 han sido ya repatriados a sus naciones de origen”, señalaron las autoridades mexicanas que precisaron que se ha ofrecido refugio en los casos procedentes.

Las autoridades subrayaron que las leyes mexicanas señalan que si sus propios ciudadanos o los extranjeros deciden salir del país, deben de cumplir los requisitos de entrada del país al que decidan ingresar.

A México “no compete” ejercer decisiones migratorias de Estados Unidos o de otras naciones y serán las autoridades de este país las que decidan si autorizan o no la entrada de estos migrantes de la caravana.