Internacional

Un policía muerto y un centenar de manifestantes heridos tras marchas en Venezuela

Un policía murió y otros dos resultaron heridos este miércoles durante enfrentamientos entre agentes y manifestantes de oposición en Venezuela, en tanto unos 100 manifestantes resultaron heridos.

Lilian Tintori ondea una bandera venezolana. (Foto Prensa Libre: AP).

Lilian Tintori ondea una bandera venezolana. (Foto Prensa Libre: AP).

“Lamentablemente tenemos un oficial de la policía del estado Miranda fallecido, José Alejandro Molina Ramírez, y tenemos dos oficiales heridos, uno por arma de fuego y otro por un objeto contundente”, señaló el ministro de Interior y Justicia Néstor Reverol en una comunicación telefónica con la televisora gubernamental. 

El militar aseguró que manifestantes iniciaron “un ataque con armas de fuego” contra policías que el miércoles en la noche acudieron a disolver el bloqueo de un tramo de la carretera entre Caracas y San Antonio de los Altos, una ciudad satélite de la capital.

El dirigente opositor Henrique Capriles, gobernador de Miranda, confirmó la muerte del agente, que calificó como un “suceso lamentable” en un mensaje en Twitter.

Reverol indicó que dos personas están detenidas por su presunta vinculación en los sucesos, mientras que el Ministerio Público confirmó el inicio de una investigación.

El ministro hizo un llamado a “la paz” luego de multitudinarias manifestaciones opositoras en las principales ciudades del país como protesta por la suspensión del proceso hacia el referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro.

“Seguimos llamando a la paz, llamando a la prudencia”, agregó Reverol.

El oficialismo ha acusado a la oposición de tener planes para generar disturbios durante las protestas y justificar un intento de “golpe de Estado”.

El número dos del chavismo, Diosdado Cabello, expresó en su programa semanal de televisión que la muerte del agente es consecuencia “de la locura” de los adversarios de Maduro, responsabilizando por lo ocurrido a Capriles, uno de los principales líderes de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

Tras la jornada de movilizaciones de este miércoles, la oposición convocó a una huelga general de 12 horas para el viernes y a una marcha al palacio presidencial de Miraflores, en Caracas, el 3 de noviembre.

Lesionados

Las marchas del miércoles también dejaron más de un centenar de manifestantes heridos, según dio a conocer Capriles en una conferencia de prensa en donde mostró las fotografías de algunos lesionados.

También se reportó la detención de al menos 80 personas.

La oposición venezolana se movilizó el miércoles en varias ciudades, en una demostración de fuerza tras el duro golpe recibido por la suspensión del proceso de referendo revocatorio.

Con la expectativa de mostrar una vez más su musculatura, la oposición venezolana convocó a protestar en todos los estados del país para rechazar la suspensión del proceso que activaría un referendo para exigir la salida de Nicolás Maduro.

Calificada así por la oposición, la “toma de Venezuela” exige el fin del gobierno socialista.

La confrontación política en el país escaló este lunes después de que la Asamblea votara a favor de iniciar un juicio político al presidente por la supuesta ruptura del orden constitucional.

No obstante, es poco probable que la votación del martes tenga consecuencias legales: aunque ésta será dominada por la oposición, Maduro sigue en control de otras ramas del gobierno, como las Fuerzas Armadas y el Tribunal Supremo, que ya ha declarado ilegítima la Asamblea Nacional.

Al grito de “¡Democracia sí, dictadura no!” y “¡Queremos contarnos ya!, centenares de opositores que portaban banderas venezolanas empezaron a concentrarse este martes por la mañana y desde siete puntos de Caracas empezaron a exigir la “restitución del hilo constitucional” y la realización del referendo.

El Consejo Nacional Electoral —también controlado por el oficialismo— suspendió el proceso de recolección de los cuatro millones de firmas necesarias para activar el referendo bajo el argumento de que acataba órdenes de tribunales penales que detectaron un fraude en una colecta previa. Sin embargo, esta consulta ofrecía la mejor vía para resolver la crisis política y económica de manera pacífica.

Los legisladores de oposición sustentaron la pertinencia del juicio político contra Maduro con el argumento de que el mandatario ha dejado de lado sus tareas y deberes constitucionales. Sin embargo, es poco probable que el proceso concluya de la misma manera que en otros países latinoamericanos como Brasil, donde la presidenta Dilma Rousseff fue destituida de su cargo.

En Venezuela, la Asamblea Nacional sólo pueden reclamar un juicio político, pero la ley establece que el proceso debe ser avalado por la Contraloría y la Fiscalía General. Y más allá de esto, la decisión final recae en el Tribunal Supremo de Justicia, cuyos magistrados nunca han votado en contra de Maduro y son señalados de estar bajo el control del oficialismo.

En declaraciones realizadas durante un mitin este martes, Maduro acusó a los legisladores opositores de comportarse como miembros de un “circo” y de intentar un “golpe parlamentario”.

Pese al aumento de la tensión, el gobierno y la oposición acordaron que intentarán dialogar para desactivar la crisis. Está previsto que las conversaciones auspiciadas por el Vaticano y otros gobiernos sudamericanos comiencen el 30 de octubre en la isla caribeña de Margarita.

  • Vea abajo galería de fotos de la masiva movilización

Maduro, que el lunes tuvo una audiencia privada con el papa Francisco en el Vaticano, dijo que viajará personalmente a la isla para iniciar este acercamiento.

Intentan boicotear marcha

En la capital, manifestantes que venían desde estados cercanos encontraron impedimentos de las autoridades que, según los dirigentes de la MUD, han restringido el acceso a la ciudad y bloqueado alguna autopista.

El dirigente opositor Henrique Capriles aseguró en Twitter que algunos accesos hacia Caracas mantienen alcabalas que ocasionan retraso y bloqueo a las personas que viven en los suburbios de la capital venezolana y quieren acudir a la convocatoria.

El metro de Caracas, el principal medio de transporte que cruza la ciudad, anunció en la misma red social que cerca de 10 estaciones se encuentran cerradas para resguardar al personal y las instalaciones en previsión de posibles incidentes.

“El maula en Miraflores (presidente Nicolás Maduro) cree que cerrando vías de acceso a Caracas y 10 estaciones del Metro evitará La Toma De Venezuela. Vamos todos!”, escribió Capriles en su cuenta de Twitter.

Varios comercios del este de la capital permanecían cerrados, mientras que siete estaciones del metro de la ciudad fueron clausuradas “en resguardo de los usuarios”, según la empresa administradora.

La denominada “Toma de Venezuela” ocurre en el que debía ser el primero de tres días para la recolección de cuatro millones de firmas (20% del padrón electoral), último paso antes del llamado a referendo. Al cumplir ese requisito, la oposición quería evidenciar el mayoritario rechazo al gobierno.

Pero el proceso fue suspendido la semana pasada por tribunales penales regionales, que acogieron denuncias de fraude del oficialismo en una primera etapa de recolección de firmas.

Gobierno y oposición, que se acusan mutuamente de “golpismo”, exploran al mismo tiempo la posibilidad de un diálogo con facilitación del Vaticano, en medio de una aguda crisis económica que se traduce en escasez de alimentos y medicinas y una inflación calculada por el FMI en 475% para este año.

El gobierno culpa de la crisis económica a “empresarios de derecha” que buscan desestabilizarlo, pero la oposición responsabiliza al modelo socialista y sostiene que el revocatorio era la última “válvula de escape” de una población hastiada de hacer largas filas para conseguir los pocos productos a precios subsidiados.

Para este miércoles, Maduro convocó al Consejo de Defensa de la Nación, del que participan los poderes públicos y en el que se propone abordar lo que considera un “golpe parlamentario”, en referencia a un juicio de responsabilidad política que la Asamblea acordó iniciar en su contra.

En ese contexto el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino, y el alto mando militar ratificaron su “lealtad incondicional” a Maduro.

Llaman a paro nacional

La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) convocó a una huelga general de 12 horas el próximo viernes en todo el país, así como a una manifestación hacia el palacio presidencial el 3 de noviembre, anunció el secretario ejecutivo de la plataforma de oposición, Jesús Torrealba.

Al término de una manifestación en Caracas que reunió a decenas de miles de personas en el marco de la llamada “Toma de Venezuela”, los dirigentes de la MUD dijeron que marcharan al Palacio de Miraflores para notificarle al presidente del país, Nicolás Maduro, las decisiones que adopte la Asamblea Nacional en relación con su cargo.

¿Abandono de cargo?

El dirigente opositor Henrique Capriles afirmó este miércoles que la Asamblea Nacional de Venezuela (AN, Parlamento) tiene la competencia para declarar el próximo martes el abandono de cargo del presidente, Nicolás Maduro, lo que dijo tendría como consecuencia el llamado a un nuevo proceso electoral.

“La Asamblea Nacional el próximo martes puede declarar no solo la responsabilidad política de Nicolás Maduro, sino también podría declarar el abandono del cargo lo que conllevaría a un nuevo proceso electoral. Ese es un proceso que le corresponde iniciar, sustentar y decir a la Asamblea Nacional”, aseguró Capriles en un comunicado.

El dos veces ex candidato presidencial lideró junto a otros dirigentes de la alianza de partidos Mesa de la Unidad Democrática (MUD) el llamado de los opositores a la “Toma de Venezuela”, como manifestación de rechazo a la suspensión del referendo revocatorio presidencial, que consideran una “ruptura del hilo constitucional”.