Internacional

Minorías cristianas sufren persecución

El grupo Estado Islámico avanza en Siria, Irak y Libia, donde perpetra matanzas contra poblados que no profesan el islam.

En junio del 2014 comenzó la ofensiva del grupo terrorista Estado Islámico (EI) en Irak —en Siria empezó en diciembre del 2013—, y con ello el calvario de las minorías cristianas, quienes desde esa fecha son víctimas de persecución, asesinatos, crucifixiones y decapitaciones, entre otras brutalidades perpetradas por los yihadistas.

Uno de los capítulos más indignantes se registró hace casi un mes, cuando el EI difundió un video por internet  que muestra cómo son decapitados 21 cristianos coptos egipcios en Libia. Los yihadistas dicen en la grabación que es una venganza contra los cruzados, por los bombardeos encabezados por países occidentales.

El hecho  más reciente fue el secuestro de unos 200 cristianos asirios, otra minoría que reside en Siria. El avance de los yihadistas tiene éxito por la guerra civil que afronta Siria y   los conflictos étnicos, religiosos, políticos y económicos que dividen a los habitantes de Irak y, ahora, Libia.

Ante el temor por los asesinatos del EI, unos cinco mil cristianos asirios abandonaron sus casas en  en las ciudades de Hasake y Qamishli, noreste de Siria.
Cerca  de 200 mil mil asirios, una de las comunidades más antiguas convertidas al cristianismo, vivían en Siria antes de que comenzara la guerra civil, en el 2011; la mayoría de ellos en Hasake, pero ahora solo quedan unos 20 mil. También hay comunidades asirias en Turquía e Irak.

Su idioma, el asirio, es una mezcla de acadio, una antigua lengua de Mesopotamia, y de arameo, que también se usa en la liturgia. Son cristianos y siguen a las iglesias caldea, siriaco-ortodoxa y la asiria del Este.

Al ocupar estos poblados, el Estado Islámico ha pedido a los lugareños  que quiten las cruces de las iglesias, algo que causa malestar entre los cristianos asirios, pero deben obedecer para evitar represalias de estos yihadistas, quienes siembran el terror desde hace más de un año en las ciudades que ha ocupado en Siria e Irak.

“Saben muy bien que secuestrar a cristianos da mucho que hablar a escala mundial”, dice Osama Edward, director de la red asiria de los derechos humanos con sede en Suecia.

El EI se apoderó de zonas de Irak y de Siria en las que ha cometido todo tipo de atrocidades como decapitaciones, limpieza étnica, secuestros y violaciones, y que la ONU considera como crímenes contra la humanidad.

Aunque la coalición internacional, encabezada por Estados Unidos, bombardea constantemente posiciones del Estado Islámico, este grupo no cede en su avance en Siria, Irak y, ahora, en Libia, por lo que las minorías se han organizado en milicias para enfrentarlo.

Los cristianos de Hasake plantan cara a los yihadistas con una milicia, la cual también  colabora con las fuerzas kurdas para frenar el avance de los radicales.
El Consejo Militar Siriaco Sirio  (CMSS) es la principal facción cristiana rebelde de la provincia de  Hasake y cuenta con tres batallones de entre 300 y 400 combatientes, que en total suman alrededor de un millar, explicó  uno de sus comandantes, Kino Gabriel.

Desde su formación, en enero del 2013, se han enfrentado a las tropas del régimen sirio, al Frente al Nusra —filial de Al Qaeda en Siria— y ahora al EI.

Mientras las minorías religiosas huyen de Siria, Irak y Libia de los yihadistas, generando un drama humanitario, organizaciones de derechos humanos se preguntan cuándo actuará el mundo para defenderlos.

ESCRITO POR: