Guatemala

Santos sigue en contienda

El mandatario Juan Manuel Santos y el derechista Óscar Zuluaga, opuesto al proceso de paz con las Farc, disputarán la Presidencia de Colombia en segundo turno el 15 de junio próximo, tras las votaciones de ayer, que dieron una ventaja valiosa al candidato opositor.

El derechista Óscar Zuluaga y el mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, deberán fortalecer sus alianzas en los próximos días de campaña. (Foto Prensa Libre: EFE).

El derechista Óscar Zuluaga y el mandatario colombiano, Juan Manuel Santos, deberán fortalecer sus alianzas en los próximos días de campaña. (Foto Prensa Libre: EFE).

BOGOTÁ.- “Los colombianos tendrán dos opciones. Podrán escoger entre quienes queremos el fin de la guerra, y quienes prefieren guerra sin fin”, dijo Santos, al grito de “¡paz!, ¡paz!”, de sus seguidores que lo acompañaron en su sede.

Tras una campaña electoral marcada por el debate en torno al diálogo que el Gobierno adelanta en Cuba con la guerrilla comunista de las Farc, Zuluaga superó al presidente al obtener el 29.3% de los votos contra el 25.7% de Santos, escrutado, hasta el cierre de esta edición, el 99.9% de las mesas.

Al no haber alcanzado ninguno de los dos el 50% más uno de los sufragios, deberán medirse nuevamente dentro de tres semanas, según la autoridad electoral.

“No podemos dejar que las Farc pretendan comandar el país desde La Habana”, dijo el opositor de 55 años ante sus votantes, al insistir en que buscará una paz sin impunidad para los “crímenes atroces y delitos de lesa humanidad” de la guerrilla.

Santos, en el poder desde el 2010, busca un nuevo mandato de cuatro años para sellar el acuerdo que negocia con las Farc desde noviembre del 2012, y que según su adversario permitirá la incorporación política de los rebeldes sin previo castigo.

Santos y Zuluaga, aliados en el pasado, protagonizaron una campaña cargada de acusaciones mutuas de guerra sucia y llegarán a la segunda vuelta con posturas irreconciliables frente a las Farc, la mayor guerrilla del país con unos ocho mil combatientes y que mañana cumplirá 50 años de lucha armada.

La abstención rondó el 60% —lo que según analistas se debió al hastío por la campaña—, en una jornada considerada por el Gobierno como la más segura en la historia reciente, en medio de la tregua electoral que declararon las guerrillas.