Comunitario

Henry Hernández: “Ya no hallaba las horas de verlas”

"Papi, papi", fueron las palabras de bienvenida de Celeste Guadalupe al ver a  su padre, el bombero Henry Hernández Martínez, cuando ingresaba en su vivienda después de salir  del hospital de accidentes El Ceibal, del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), donde estuvo  internado 11 días tras ser arrollado por un piloto ebrio, a causa de lo cual perdió una pierna.

El Bombero Herny Hernández sale del hospital 7/19 luego de sufrir un accidente y perder una pierna. (Foto Prensa Libre: É. Ávila) <br _mce_bogus="1"/>

El Bombero Herny Hernández sale del hospital 7/19 luego de sufrir un accidente y perder una pierna. (Foto Prensa Libre: É. Ávila)

A  su egreso fue trasladado en una ambulancia de los Bomberos Voluntarios a la sede de la Compañía 31, en San Lucas Sacatepéquez, Sacatepéquez.

Allí sus compañeros le dieron la bienvenida con cohetillos. “Qué bien se siente estar aquí de vuelta”, expresó Hernández.

Después fue llevado en caravana a su domicilio, en San Bartolomé Milpas Altas. A su llegada, vecinos se acercaron y le decían: “Seguí adelante”.

Abrazos

Cuando ingresaba en su casa, su hija Celeste, de 4 años, salió corriendo a recibirlo y lo primero que dijo fue: “Papi, papi”, y luego lo abrazó y lo besó.

Al llegar a su habitación se sumó su hija Andrea, 2, quien  lucía radiante de alegría.

Hernández Martínez expresó: “Ya no hallaba las horas de verlas —al referirse a  sus hijas—. Es por lo que estaba luchando en el hospital”.

Mientras tanto, su esposa, Verónica Canahuí, dijo: “Mis hijas lo van a poder seguir disfrutando”, y lloró.

La próxima semana continuará   su rehabilitación en la capital, y para ello el Seguro Social le prestará servicio de transporte.

El socorrista fue arrollado el sábado 17 de enero por la noche,  por un vehículo cuyo piloto conducía   en estado de ebriedad y que colisionó contra una ambulancia en el momento que  los bomberos auxiliaban a una persona atropellada, que ya había fallecido.

Podría caminar en un año

Arturo García Aquino, director del hospital, explicó que la evolución clínica del socorrista ha sido satisfactoria.

El médico afirmó que Hernández Martínez podría empezar a caminar sin ayuda en un año, aproximadamente.

Detalló que el bombero ingresó a las 3 horas del domingo al hospital, con una fractura expuesta de grado tres en la pierna izquierda, además de daño neurovascular severo, lo cual significa que ya no tenía pulso y se habían dañado los huesos y músculos, por lo que hubo necesidad de amputar.

| LEA TAMBIÉN | Conductor ebrio arrolla a bomberos

Un bombero perdió la pierna izquierda y otro está inconsciente en un hospital, luego de que un conductor ebrio los arrolló en el lugar donde los socorristas atendían un hecho de tránsito, el sábado último en la noche, en el kilómetro 29.5 de la ruta Interamericana.

En la pierna derecha presentaba una fractura expuesta de  grado dos, en la  tibia y peroné.  En este miembro se le colocó un clavo  intermedular, el cual lo ayudará a consolidar la recuperación y  recobrar  movilidad.

El facultativo también mencionó que se le colocará una prótesis, aunque señaló que se tendrá que determinar de qué tipo. Las que se colocan en el IGSS son  articuladas en la rodilla y en el tobillo, y tienen un pie de descanso, fabricadas  de aluminio  con una cubierta de hule de espuma   color piel.

El mayor de los Bomberos Voluntarios, William de León, indicó que se gestionará un apoyo permanente para el socorrista, debido a que, por su condición, ya no podrá desempeñarse de manera normal.

ESCRITO POR: