Álvaro Hugo Rodas, director de Obras Públicas de la comuna capitalina, informó que luego de un análisis jurídico determinaron que la declaración de emergencia emitida por dicha Municipalidad no es suficiente para contratar de forma directa a las empresas para iniciar los trabajos en el mercado.

Carlos Sandoval, vocero de la Municipalidad capitalina, informó que el jueves último se envió una petición al Organismo Ejecutivo para que el presidente Otto Pérez Molina, en Consejo de Ministros emitan un acuerdo gubernativo donde se declare estado de Calamidad únicamente para el mercado La Terminal y con eso poder agilizar los trabajos.

La demolición obedece a las recomendaciones que hicieron el Instituto del Cemento y el Concreto, la Asociación Guatemalteca Estructural y Sísmica, así como la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres.

Luego de hacer una evaluación del área afectada, los expertos coincidieron que era factible reformar las columnas del primer piso y remplazar la estructura del segundo por una metálica lineal.

Gustavo Martínez, secretario privado de la Presidencia, indicó que hasta el mediodía de ayer “no había recibido la solicitud”. Sin embargo, aseguró que al tenerla le darán trámite y “si es factible se pasará al mandatario para que sea considerada en el Consejo de Ministros” y de esta forma puedan aprobar un acuerdo gubernativo que haga viable la petición de la comuna.

Martínez explicó que en el caso de que el acuerdo sea aprobado por el Ejecutivo, este deberá pasar al Congreso para que lo conozca, ratifique, modifique o impruebe, tal y como lo manda la Constitución.

Peticiones

Vendedores confirmaron que los trabajos de demolición iniciaron el jueves último y que las actividades tanto en los comercios del primer nivel como del segundo, ubicados de forma provisional en el parqueo, funcionan normalmente, aunque con problemas porque no llegan muchos compradores.

La comerciante Elizabeth Monterroso solicitó a las autoridades agilizar los trámites para las reparaciones y pidió a la población que se acerque al mercado a realizar compras, pues “los puestos están abiertos”.

Con el objetivo de rehabilitar las instalaciones lo más pronto posible, los inquilinos colaboran con las labores de limpieza que desarrolla el Ejército, personal de la Municipalidad capitalina y del Ministerio de Comunicaciones.

La comuna capitalina prevé que los trabajos de remozamiento finalizarán en cinco meses.