La capital ha sido escenario de diversas marchas y manifestaciones en el último mes, incluidas caminatas en contra de la minería y las empresas extractivas en el país, por las condiciones del sistema de salud y por la memoria histórica de la nación, entre otras.

“Estas manifestaciones se enmarcan en el ejercicio de la libertad de expresión y del derecho de reunión y manifestación que caracterizan una democracia y que están protegidos en la Constitución Política de la República de Guatemala”, precisó el comunicado.

La ONU en Guatemala declaró que “como fruto” de las manifestaciones “en algunos casos” se abrieron “espacios de diálogo” para escuchar las demandas de las “diferentes comunidades y pueblos indígenas”.

El Gobierno de Guatemala inició la semana pasada una serie de reuniones con pobladores del municipio de San Juan Sacatepéquez, quienes se manifestaron para exigir que se cumplieran cuatro proposiciones.

Los pobladores pidieron que se les escuchara con respecto a la construcción de una carretera regional cercana a sus pueblos, además de la instalación de una empresa cementera también cercana a sus viviendas.

La ONU subrayó que “se valoran” los esfuerzos realizados por el Gobierno de Guatemala y alentó al diálogo a la sociedad y el Estado en busca de “soluciones efectivas que garanticen el cumplimiento de los Acuerdos de Paz”.