Comunitario

Resurgimiento de enfermedades tienen su origen en las acciones del ser humano

Destruir el medioambiente influye en que enfermedades como el ébola o el chikungunya afecten al ser humano, problema que seguirá mientras no se tomen medidas para cuidar el planeta, según la chilena Guadalupe Verdejo, representante en Guatemala de la Oficina Panamericana de la Salud (OPS), que se rige por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Guadalupe Verdejo, representante de OPS Guatemala. (Foto Prensa Libre: Edwin Bercián)

Guadalupe Verdejo, representante de OPS Guatemala. (Foto Prensa Libre: Edwin Bercián)

CIUDAD DE GUATEMALA- La experta explicó que mientras continúen los cambios ecológicos, los virus y bacterias van a evolucionar para generar enfermedades cada vez más fuertes.

¿Por qué enfermedades que se creían controladas están afectando otra vez?

El resurgimiento o la recrudescencia de enfermedades como el dengue, la malaria o el ébola tienen en común la cuestión ecológica.

Transmisiones que se veían solo en el reino animal ya empiezan a afectar.

¿Cómo empiezan a surgir enfermedades?

No son nuevas, toman diferentes características. Han existido en ciertos ambientes, pero el hombre se instala donde no estaba antes, entonces empieza a cambiar el ecosistema y empiezan a recrudecer estas enfermedades.

¿Están preparados los servicios de salud?

Los servicios de salud reciben las fallas que hay en otros sistemas, no es su culpa que aparezcan enfermedades que tienen nueva resistencia.

Los tratamientos que servían para algunas ya son resistentes porque los microorganismos son inteligentes y mutan para sobrevivir. En ningún lugar del mundo se está preparado.

¿Qué se debe hacer?

Hay condiciones que hay que cumplir. También hay que verlo en un contexto cultural porque ciertas prácticas impiden que se apliquen ciertas normas. También tiene que ver el aspecto de comunicación para poder controlar una epidemia. Es importante que cuando los brotes aparecen se puedan limitar en tiempo y en lugar geográfico.

¿Qué enfermedades representan una amenaza?

Tenemos ébola, dengue, chikungunya y cólera.

¿Qué evita que una enfermedad se erradique?

Erradicar una enfermedad es muy complejo, pero sí es posible controlarla. Si hay medidas de control sobre una persona enferma se tiene que terminar el brote.

¿Cómo trabaja la OMS para tener control?

Tenemos un reglamento sanitario internacional que aprobaron todos los países del mundo, hay obligación de denunciar sobre casos sospechosos. En cada país hay un centro de enlace en donde todos los días se recibe un listado de enfermedades raras o sin diagnóstico y que pueden resultar una amenaza.

¿Guatemala cumple con esto?

Eso funciona en los países desarrollados como en desarrollo. Guatemala lo hace, y si no tenemos reactivos acudimos al Centro para el Control y Prevención de Enfermedades.

¿Cómo influye el turismo en el desarrollo de enfermedades?

El tema de las fronteras es importante. Hablando de fronteras terrestres, en agosto seguro van a aparecer casos de chikungunya en Guatemala, pero ya estamos alertados. El tema es cuando no se espera que llegue la enfermedad, porque un paciente viajó por muchos países. Debemos saber cómo controlar aquí algo que debió ser controlado en otro punto.

¿Se debe trabajar con otros ministerios?

Trabajamos de forma constante con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, y con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, en proyectos de desnutrición y que tienen que ver con el cambio climático, pero muchas veces nos encontramos con intereses económicos porque hay empresas de todo tipo que contaminan. Tenemos que trabajar con el Ministerio de Agronomía, de Energía y Minas y otros. En muchos países no existe la fiscalización a las empresas para hacer un trabajo ecológico responsable.

¿Cómo afecta que en los hospitales no hay insumos?

El presupuesto del Ministerio de Salud de Guatemala es el más bajo de todos los países de la región, es casi vergonzoso. La otra cosa es una gestión de medicamentos, que a veces no corresponde solo al sistema de salud central, muchas veces las cosas llegan a los hospitales, pero no a los pacientes.

¿Guatemala debe estar alerta por el ébola?

La OMS tiene la potestad de convocar a un comité de emergencia cuando ve situaciones que pueden transformarse en pandemias. El comité se reunió el miércoles y jueves pasados y recomendaron a la directora que declare una emergencia de salud pública mundial. Hay recomendaciones sobre lo que tiene que hacer cada país y Guatemala lo está haciendo. Estamos trabajando con el Ministerio de Salud.

¿De presentarse un caso de ébola en el país, el sistema de salud estaría preparado?

Sí, se trabaja con los aeropuertos, con el Centro Nacional de Epidemiología, estamos movilizando reactivos y va a ser posible identificarlo. Hay que hacer un diagnóstico diferencial porque el ébola puede pasar por enfermedades como el dengue y la malaria, lo principal es de dónde viene la persona. Existe la capacidad mínima para responder y detectar.

¿Qué debe hacer la población?

Las medidas son las mismas, tenemos que eliminar todos los criaderos de mosquitos, hacer higiene ambiental, tener cuidado con el personal de Salud. Es la vieja historia del lavado de manos. Además las personas enfermas no deben viajar, o si alguien ha fallecido con fiebre y se sospecha de alguna enfermedad, se debe tener cuidado con la manipulación.

¿Está cerca una cura?

Hay vacunas que son experimentales, pero que se han preparado con virus de hace tres o cuatro años, mientras no se llegue a una vacuna que se prepare rápido para el virus que está circulando, va a ser difícil.

¿Hasta dónde se puede llegar si no se cuida el ambiente?

Estamos acabando con nuestro planeta. Debemos tratar de penalizar a la gente que destruye el medioambiente o tener leyes que lo protejan. Hay que trabajar con los niños para hacer un cambio de mentalidad. Ojalá que sea temprano y no muy tarde.

“Los servicios de salud reciben las fallas que hay en otros sistemas”. Guadalupe Verdejo, de OPS Guatemala.

Alerta por Ébola

El 8 de agosto, la OMS declaró una “emergencia de salud pública de importancia internacional”, debido a que el brote de ébola en África occidental constituye un “evento extraordinario”.

El ébola es una enfermedad grave, con una tasa de letalidad de hasta 90 por ciento.

No existe tratamiento ni vacuna contra el ébola.

Los síntomas comunes son aparición repentina de fiebre, debilidad intensa, dolor muscular, de cabeza y garganta, vómitos, diarrea y erupción cutánea.

Se transmite de persona a persona, por fluidos y secreciones corporales y agujas infectadas.

ESCRITO POR: