“Yo tengo la información como alguien que lee los periódicos de América Latina, pero como Corte no hemos tenido ninguna información al respecto, y yo me tengo que atener a lo oficial”, expresó.
Al ser consultado sobre si otro país ha planteado una reserva, como lo hizo Guatemala, respondió: “No, hasta donde yo recuerdo, no”.
El presidente de la CIDH no se pronunció respecto de la posibilidad de que Guatemala fuera sancionada por haber realizado esta acción, que pretende limitar la competencia de la Corte para que no conozca casos anteriores a 1987.
Reconoce competencia
Lo que sí enfatizó García Sayán fue que Guatemala “sigue siendo un país que ha reconocido plenamente la competencia de la Corte”. “Y nos atenemos a ello y a la reserva que se hizo en su momento —1987— y en que reconoció la competencia de la Corte”, agregó.
El presidente de la CIDH indicó que cualquier otra conducta posterior a la de 1987, cuando se presentó la reserva, se tendrá que analizar conforme al proceso de cumplimiento de las sentencias que se han emitido sobre Guatemala.
García Sayán precisó que hay varios casos con Guatemala que están en la fase de supervisión de cumplimiento. “Y apostar, como siempre lo hago, a que a veces hay circunstancias internas que llevan a ciertas medidas que tienen una explicación más que jurídica, política”, subrayó.
Añadió que en los casos relacionados con Guatemala, existen pasos de solución amistosa y reparaciones —económicas—.
Prensa Libre se comunicó con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, y se informó que su presidente —José de Jesús Orozco— se encuentra en México.
Se intentó obtener la opinión respecto del tema en la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, pero allí se informó que, por existir un mecanismo de diálogo abierto y por estar en análisis en Ginebra, Suiza, no podían pronunciarse en torno a la decisión gubernamental de limitar la competencia a la CIDH.