Guatemala

Migrantes necesitan apoyo

Dos expertas en migrantes coinciden en que se debe hacer un esfuerzo adicional para informarlos a ellos y a sus familiares en Guatemala sobre sus derechos y procesos migratorios, para evitar que sean víctimas de abusos o exacciones en otros países.

Elisabel Enríquez,  coordinadora ejecutiva de Menamig.

Elisabel Enríquez,  coordinadora ejecutiva de Menamig.

Alejandra Gordillo, secretaria ejecutiva del Consejo Nacional de Apoyo a Migrantes Guatemaltecos (Conamigua), y Elisabel Enríquez, coordinadora ejecutiva de la Mesa Nacional para las Migraciones (Menamig), consideran que sí se puede hacer más por sus derechos.

¿Qué opinan de los casos de violencia en EE. UU. contra guatemaltecos?

Enríquez: La violencia no solo viene de lo intrafamiliar o el robo, también hay violencia por parte de las autoridades, y si pudiéramos ir más a fondo, encontramos expresiones de violencia contra los migrantes a través de las mismas leyes regulatorias que se pasan en Estados Unidos.

Podríamos mencionar, por ejemplo, la tan sonada ley de Arizona; también la de Alabama, y este mismo programa de comunidades seguras que de algún modo acorrala a la población indocumentada.

Gordillo: Mucho tiene que ver la desinformación. Si de alguna manera se tuviera la información, podría evitarse. Muchas mujeres en situación irregular desconocen que hay una visa U, a la cual pueden aspirar si comprueban que son víctimas de violencia. De ser así, pueden optar a casi cuatro años de visa para ellas y sus hijos, si denuncian.

En el otro caso, si se llega a un país, deben saber dónde no se puede caminar, a dónde dirigirse y qué mecanismos legales pueden utilizar para evitar ser víctimas.

¿Creen que hay una carga de racismo en estos casos?

Enríquez: En el caso de una señora que murió en enero en Nueva York, ella sí había presentado la denuncia por violencia intrafamiliar, pero no fue traducida al español.

Allí vemos la cuestión de racismo, de discriminación. Bueno, dirán: Es un hispano, es un latino; pues, allí dejémoslo.

Cuando hablamos de racismo, vemos en la ley contra migrantes que están pasando en Estados Unidos que con solo la apariencia que tenemos de ser latinos se arriesgan a que los pare la Policía en la calle. Ese tipo de cuestiones que se van dando, lamentablemente muestran racismo. Un buen porcentaje de violencia que se da en Estados Unidos obedece a temas raciales.

¿Estos casos crean temor entre los guatemaltecos que residen en Estados Unidos?

Gordillo: Definitivamente hay temor. El miedo es cuando se es una persona irregular, no importa el país, pero si se encuentra en una situación irregular, siente menos tranquilidad. El migrante es vulnerable porque tiene temor a denunciar, a perder su trabajo, y así pierde la oportunidad de enviar dinero a su país. La situación de vulnerabilidad en cualquier aspecto, social, laboral, permanece porque en sí mismo hay una situación que lo hace estar en desventaja.

Por ejemplo, ingresar en Estados Unidos sin visa es una falta administrativa, pero la patrulla fronteriza los trata como delincuentes. Los ven ilegales y piensan que violentaron una ley mayor. Los tratan como si fueran ladrones o asesinos, y ellos se encuentran en situación de vulnerabilidad.

¿Creen que autoridades estadounidenses se esfuerzan por investigar casos de violencia?

Enríquez: El acceso a la justicia puede tener diferentes interpretaciones, y lamentablemente en la mayoría de los casos hemos visto cierto beneplácito hacia personas que han cometido algún delito contra guatemaltecos. Por ejemplo, el caso de la comunidad La Joya, Texas, en octubre del 2010, donde dos guatemaltecos fueron asesinados desde un helicóptero por un francotirador.

El juicio todavía está en proceso, pero en fase inicial las autoridades descartaron que haya sido intencional. Dijeron que había sido un “lamentable accidente”. En algunos procesos existe la excusa de que las personas están en situación irregular. Hay situaciones de discriminación y no se les beneficia, sino se les ve como personas de segunda categoría por su situación de irregularidad en que se encuentran.

¿Qué puede hacer el gobierno guatemalteco en estos casos?

Gordillo: Allá se escudan en los protocolos policiales. Si ellos tienen un protocolo y le dicen a la persona que se detenga y no lo hace, ellos tienen libertad de activar el protocolo.

Nosotros como Consejo intentamos dar información, porque si ellos han infringido una ley es donde se da el problema, porque no se le puede prestar ayuda a una persona dentro de un proceso, si cometió algún tipo de irregularidad.

El Consulado se hace presente, porque tiene orden de presentarse en casos de alto impacto, pero no puede tener injerencia legal, por un convenio internacional. Puede dar acompañamiento, pero no puede litigar un caso.

¿Qué se necesita para brindar protección a migrantes guatemaltecos?

Enríquez: Hay urgente necesidad de que se amplíe la red consular. Ahora hay 11 consulados. Es urgente ampliarlos con más personal, porque ahora están dirigidos a la documentación de pasaportes, pero no existe acercamiento con la comunidad que les pueda brindar ese tipo de información.

Gordillo: El principal reto es informar y fortalecer los consulados, y elevar el número, porque se tiene que dar seguimiento a nuestra gente que tiene poco nivel educativo, y los hacen firmar documentos.

Intentan evitar estafas

Menamig y Conamigua dicen que continúan estafas a familiares de migrantes.

En Escuintla y Huehuetenango es donde más casos de estafa se dan contra familiares de migrantes.

Les dicen que con la reforma migratoria podrán viajar si tienen familiares en Estados Unidos.

Les cobran desde Q6 mil hasta Q16 mil por los supuestos trámites en la embajada estadounidense.