“Nuestro compromiso es aplicar con éxito esta ley para incrementar la seguridad en las carreteras de California y proteger el alto nivel de seguridad en el proceso de verificación de identidad y emisión de licencias” , dijo la directora de la agencia Jean Shiomoto.      

Para los guatemaltecos, será necesario presentar pasaporte y Documento Personal de Identificación (DPI), al igual que para los ciudadanos salvadoreños.

Los mexicanos sólo tendrán que mostrar un documento para comprobar su identidad, ya sea matrícula consular, pasaporte o credencial para votar. Quienes tengan licencias de California o carnés estatal de identidad emitidos a partir de octubre del 2000 también podrán usar este documento como único comprobante. El tratamiento especial con México, dijo la agencia, se debe a que este organismo tiene un acuerdo con el gobierno mexicano para verificar electrónicamente la información en los documentos.         

Algunos países latinoamericanos, como Ecuador y Colombia, no aparecen en la lista de pasaportes aprobados.

Los requisitos de residencia podrán ser comprobados con documentos como contrato de renta y facturas de servicios públicos como agua y luz, de acuerdo con la agencia.    

California prevé que 38% del 1.4 millones de solicitantes potenciales tramiten licencias en el primer año fiscal, el 50% en el siguiente y el 12% entre 2016 y 2017.      

La licencia especial no servirá como identificación federal. Tendrá la aclaración “se aplicarán límites federales” en el frente para cumplir con una ley nacional de seguridad establecida después de los ataques terroristas del 11 de septiembre.      

Los solicitantes que no puedan comprobar su identidad con los documentos requeridos, podrán pasar por un proceso de revisión secundario. En esta revisión, la agencia aceptará documentos como comprobantes de estudios, declaraciones de impuesto a la renta, licencias de manejar de países extranjeros y documentos de corte. Los solicitantes también tendrán que ser entrevistados por un investigador de la agencia.           

Otros estados también ofrecen licencias a personas que viven en el país de manera ilegal pero California es el primero que ofrece un segundo proceso de revisión