Hablemos de desigualdad

Samuel Pérez Attias

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Sin embargo, por la misma naturaleza de los mercados, la concentración sistemática de los limitados factores para crear riqueza en el tiempo y en un grupo humano exclusivo, actuaría consecuentemente en detrimento de la movilidad social de otros grupos humanos. Precisamente el fundamento de los mercados —el egoísmo que mueve a la mano invisible—  motiva a que quien tenga más acceso a factores productivos —tierra, capital humano, financiero, tierra, energía humana y capacidad empresarial— busque protegerlos, evitando que un potencial competidor los usurpe.

De hecho, quien acapara riqueza buscará acceder a más factores productivos para seguir generando riqueza personal. Esa es la naturaleza del homo economicus y que Adam Smith definió como el fundamento de lo que hoy conocemos como teoría  de mercados. Un sano “capitalismo” —concepto aún ambiguo— proveería a cualquier persona   acceso a movilidad social, siempre y cuando esta tenga acceso a recursos para crear  riqueza.

Es decir, esos factores productivos mencionados arriba. Si un sistema capitalista no provee de su acceso a las generaciones entrantes, falla, pues en el largo plazo, los recursos tenderán a concentrarse minando condiciones para seguir compitiendo y en detrimento del crecimiento económico y del dinamismo de mercado, como lo evidencian varios estudios, incluyendo el último de T. Piketty.

Esto justifica la existencia de factores externos que provean movilidad social a través de compensaciones o estructuras regulatorias. Allí es donde empiezan las ronchas ideológicas y el debate político. Debemos recordar que los mercados se basan en la capacidad individual de creación de riqueza, no en su distribución. Sin embargo, para crear riqueza, la dotación inicial de factores productivos es fundamental. Si existen desigualdades estructurales en esa dotación inicial, el sistema de mercado presentará fallas para que los individuos alcancen bienestar. Esto entra en el campo normativo de la justicia. ¿Es “justo” que alguien, por el hecho de haber nacido en cierto grupo humano o contexto, tenga menos acceso a factores para crear riqueza   que alguien que nació en otro contexto donde será recompensado con un menor esfuerzo relativo?

En un sistema que busca el bienestar humano integral existen diversas formas de reducir las desigualdades en la dotación de factores, como las políticas sociales que buscan equidad para competir en los mercados. Esos son más insumos para el debate, para futuras columnas y,  sobre todo, para las futuras generaciones.

Samperez1@gmail.com

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