La sociedad estadounidense está acostumbrada a acciones legales, los jueces tienen independencia y en general se considera que aplican en su totalidad las posibilidades dentro de las leyes. Por aparte, la impugnación fue presentada por 26 gobernadores republicanos, lo que convierte   la decisión del juez en un instrumento político. Bajo la lupa de cómo funcionan las cosas en Guatemala, los guatemaltecos no dudan un momento en sospechar una relación entre el juzgador y los integrantes del partido que desea utilizar hasta el extremo la fuerza que obtuvo en las elecciones de hace pocos meses.

El respeto de las leyes es una de las características de las sociedades, pero en esto   existe también la mala intención de aplicarlas. En este caso, se manifiesta con el hecho de que hay riesgo de que se den miles de casos en que los padres serán deportados y con ello separados de sus hijos nacidos en Estados Unidos, lo que causará una crisis grave.

El efecto peor se verá en el conglomerado de hispanos que tienen sus documentos en regla y que además son miembros o al menos tienen la tendencia a votar por los candidatos republicanos. El papel de los hispanoparlantes republicanos moderados se hará cada vez más difícil, pero en especial de quienes nada más favorecen al partido opositor con darle su voto en los comicios.

La tendencia a simplificar las cosas hará que se manifieste o se acreciente la idea de que los hispanos —con o sin documentos— vean a los republicanos como enemigos y como amigos a los demócratas, en una dicotomía que no es real, porque entre el partido de Obama también hay un ala que aprecia poco a la comunidad hispana.  No se puede dejar de pensar, además, que el ofrecimiento haya sido una estrategia política para lograr esa dicotomía, con el objetivo de reconciliarse con el voto hispano, que había sido descuidado en el campo de las promesas presidenciales de las dos victorias demócratas anteriores.

Es interesante hacer notar que, históricamente, los republicanos han sido el partido que ha tenido la imagen de ser el que pone más  atención a la situación de Estados Unidos dentro de la comunidad internacional. Pero esta vez, a causa de su obsesión por causarle daño al presidente Obama, no se fijan en el mundo, por decirlo así, y mucho menos en los países que se encuentran a la vecindad sur del territorio estadounidense, aunque ello pueda representar un peligro para la seguridad nacional. La suspensión, calificada de temporal, debe ser lo más corta posible, para que los republicanos tengan tiempo para  intentar la recuperación del terreno evidentemente perdido entre los electores hispanos.