HAGAMOS LA DIFERENCIA

Ejemplo empresarial

|

En medio del debate sobre Salarios Diferenciados para cuatro municipios del país, buscando competir por “mano de obra barata”, el grupo Progreso recibe 12 reconocimientos en el ranquin centroamericano como mejor empresa nacional para trabajar. Apareció en las listas de Great Place to Work® en América Latina de junio del 2013 y marzo del 2014.

El mérito es significativo para Guatemala porque, en la categoría de empresas nacionales con más de 500 trabajadores, esta empresa aparece en el top 10 de América Latina, donde únicamente seis países figuran: Brasil, Colombia, Chile, Guatemala, México y Perú. Representados por las empresas Liderman, Perú; BEME, Brasil; Laboratorio SABIN, Brasil; GAZIN, Brasil; Interseguro, Perú; SAMA, Brasil; FIRA, México; Cine Planet; Perú, y Aseguradora Solidaria de Colombia; Colombia. La mayoría son empresas de servicios en que el trato al cliente es crítico. En comparación, Cementos Progreso es una industria productora de cemento, que se ha abierto campo en la construcción, infraestructura y bienes raíces. Además, es la única empresa Centroamericana entre la lista de 30 empresas.

El enfoque de la medición fue el nivel de confianza del empleado, buscando aumentar el nivel de esta confianza en las empresas latinoamericanas. Esto requiere que las empresas realicen acciones para que los empleados se sientan seguros en sus puestos. A pesar de que en el 2012 Cementos Progreso hizo un reajuste organizacional, la percepción que sus empleados tienen no fue demeritada, ya que ese reajuste se realizó en una forma muy objetiva y pragmática. El EthiSphere Institute la reconoció por segundo año consecutivo como una de las empresas más éticas del mundo.

La visión de Carlos Federico Novella Kleé de fundar una de las primeras fábricas de cemento en octubre de 1899, sin que el país estuviera acostumbrado a utilizar cemento como material de construcción, fue estratégica. Su éxito fue fabricar cemento Portland inventado en 1824, en Inglaterra, por el constructor Joseph Aspdin. Es una de las empresas familiares más antiguas.

La pregunta que nos hacemos después de estas noticias es: ¿qué están haciendo las empresas guatemaltecas para generar confianza en sus trabajadores? Si muchas, emulando al Gobierno, desarrollan su trabajo bajo contratos temporales de corto plazo, lo que crea inseguridad en los empleados y poco desarrollo a las empresas. Otras piensan en obtener mejores ganancias al tener salarios de miseria, muy por debajo del salario mínimo. Conveniente sería que las empresas valoren su talento humano y reconozcan el trabajo de sus colaboradores, al gratificar proporcionalmente el esfuerzo que realizan en bien de la empresa.

¿Será realmente una salida justa, crear fuentes de trabajo pensando en mano de obra barata con salarios por debajo del valor de la canasta básica? O será mejor repensar los proyectos de manera que puedan asegurar su sostenimiento en el tiempo, generando buenas ganancias, con el apoyo de colaboradores contentos con su empresa y que en el día a día busquen cómo ser más productivos para tener derecho a más.

samreygo@yahoo.com

ESCRITO POR:

Samuel Reyes Gómez

Doctor en Ciencias de la Investigación. Ingeniero agrónomo. Perito agrónomo. Docente universitario. Especialista en análisis de datos, proyectos, educación digital. Cristiano evangélico.

ARCHIVADO EN: