IMAGEN ES PERCEPCIÓN

Corruptos y corruptores

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Ante la revelación de la Cicig y el MP sobre la implicación de exfuncionarios y empresarios en una estructura macrocriminal durante el gobierno del Partido Patriota, surgen interrogantes que vale la pena plantear.

Esta información no es una novedad, es solo la confirmación oficial de lo que la mayoría del pueblo pensante e informado ya sabía, pero que nadie se atrevía a afirmar sin pruebas.

La estructura súper mafiosa de alto calibre tenía tentáculos en todos lados y aunque los cabecillas Pérez y Baldetti ya están en el banquillo de los acusados, la pregunta es: ¿Dónde están sus compinches? me refiero a sus abogados y asesores cercanos que les ayudaban a hacer los grandes negocios sucios y también se beneficiaban. Deben andar muy tranquilos y forrados en dinero, sin que nadie siquiera mencione sus nombres.

La otra pregunta es: ¿Por qué están aún libres y sin ningún cargo los exministros patrioteros cuestionados? Seguramente existen pruebas para poder iniciar acciones en su contra, por acción u omisión. Esto deja un mal sabor de boca y hace que se tengan dudas y cierta desconfianza de todo este show de justicia selectiva.

¿Y qué hay de los corruptores? Es decir, algunos de los grandes empresarios con fachada VIP y que dicen ser familias de la rancia aristocracia guatemalteca, pero aun así han sido implicados en negocios con los funcionarios corruptos. La investigación demostró la manera como Otto y Roxana operaban con el respaldo de importantes empresarios.

Hasta ahora no han salido a luz todos los nombres de los culpables, pero seguro habrá sorpresas interesantes. Muchos de ellos han amasado sus grandes fortunas por décadas, a costa de manipular a su gusto y antojo a los presidentes de turno.

En el fondo estos empresarios han sido corresponsables del estancamiento económico y extrema pobreza del país. A ellos no les conviene que haya educación, para mantener al pueblo ignorante y así aprovecharse. Tampoco que haya salud pública, para así lograr introducir en el mercado seguros médicos baratos y enriquecerse brutalmente a costa de la desgracia de los más pobres.

La ambición es ilimitada y si alguien ha cooptado el Estado han sido ellos. Pérez Molina ha insinuado que revelará los nombres de estos empresarios y ojalá lo hiciera.

Pero este fenómeno del poder económico influyendo en el gobierno y la política de un país no es nuevo y ocurre en casi todo el mundo. Pero con la diferencia de que aquí este grupo no permite que se invierta ni un centavo en educación, salud y seguridad, para lograr enriquecerse exponencialmente.

El caso del Partido Patriota fue la gota que derramó el vaso, por los excesos de Baldetti, pero todo el mundo sabe que no fue el único gobierno corrupto que cooptó el Estado; ahora le toca a Colom y seguir con los otros.

Este cáncer se ha mantenido por décadas, sin importar el gobierno de turno. Este grupúsculo ha manejado realmente los gobiernos y llegó a consolidar un poder fáctico que se apoderó totalmente del país.

Estamos frente a un sistema de corrupción estructural y ahora es el momento y la oportunidad de que el pueblo vuelva a ser el gran protagonista, manifestándose de nuevo para evitar que las redes mafiosas sigan actuando. Concretamente se exigirá la depuración del Congreso y cancelar el monopolio en la televisión abierta.

La Cicig y el MP han propiciado el escenario y las condiciones, pero quien debe accionar es el pueblo.

Esta batalla apenas empieza, tendrán que rodar muchas cabezas más, esto es un proceso que requiere tiempo y valentía. Pero que tendrá éxito si se actúa dentro del marco de la justicia y legalidad.

imagen_es_percepcion@yahoo.com

ESCRITO POR:

Brenda Sanchinelli

MSc. en Relaciones Internacionales e Imagen Pública. Periodista, experta en Etiqueta. Dama de la Estrella de Italia. Foodie, apasionada por la buena mesa, compartiendo mis experiencias en las redes.