Señor presidente, ante todos los comunicados que han salido en los últimos días diciendo que Ud. busca llegar con el Secretario Gral. de Naciones Unidas, António Guterres, para pedir la destitución del titular de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), Iván Velásquez, me tomo este espacio para pedirle que en su visita solamente hable de su mandato, y de su irrestricto apoyo a la justicia en Guatemala.

Si existen asesores que le piden hacer lo contrario, piense en las consecuencias que esto le podría traer, porque se desatarían muchos enojos de diferentes sectores que apoyan la eliminación de la corrupción y la impunidad y que reconocen el inmenso y buen trabajo que Iván ha venido haciendo durante estos últimos años. Esto ocasionará un desgaste adicional a su gobierno y a su persona, y debilitaría su gestión. Más aún, se incrementaría la polarización de la población, pues hay muchos intereses de diversos tipos y Ud. no querrá ser parte de más polémica y desunión. Promover la destitución de Iván Velásquez sería el peor error que podría cometer, pues es como colocarse al lado de quienes promueven la impunidad.

Recuerdo claramente cuando Roxana Baldetti y Otto Pérez Molina hacían cualquier cantidad de esfuerzos en el 2014- 2015 porque se fuera la Cicig de Guatemala, y en esa oportunidad me pronuncié en contra, varias veces, a través de mi columna. Esta vez le doy mi voto de confianza de que Ud. no hará nada por destituir a Iván Velásquez de la Cicig. Quienes amamos a Guatemala debemos apoyarle para que se quede, pues es el único que ha logrado desenmascarar tanta corrupción que habita en nuestro país y estoy segura de que Ud. también ama a Guatemala.

Nadie es perfecto, ni Iván Velásquez ni la Fiscal General, Thelma Aldana, y quizás podamos darles algunos tips para mejorar la manera de reforzar la justicia y que no sea cárcel para todos, pues hay quienes pudieron haber sido castigados con cárcel domiciliaria, no así los políticos que han saqueado el país. Debemos aceptar que lo que la Cicig ha logrado junto a la Fiscal General es algo fuera de palabras. Si se va él y se va ella, caemos nuevamente en otra etapa oscura, retrocediendo décadas cuando ya se abren tantos interesantes procesos de justicia para Guatemala.

Confío también en que el Congreso de la República hará su parte para que finalmente se aprueben las reformas constitucionales que hagan posible un mejor fortalecimiento de la justicia.

Nuestro objetivo debiera ser en todo momento avanzar en la lucha contra la corrupción y la impunidad, y si Ud. aspira a un amplio nivel de convergencia nacional, no me cabe la menor duda de que hará lo necesario para lograr ese cometido.

Hemos avanzado a pasos agigantados y somos un ejemplo para el resto del mundo. Muchos países que buscan erradicar la corrupción nos toman de ejemplo. Ud. tiene hoy la decisión de cómo quiere que lo juzgue la historia; como un presidente que hizo algo para erradicar la corrupción o alguien que amamantó la impunidad.

Sr. presidente, confío en que Ud. será el mejor exponente de la unidad nacional y que no permitirá polarización entre la sociedad guatemalteca, ya que sus decisiones y acciones deben estar dirigidas siempre hacia la búsqueda del fortalecimiento de la justicia. Una vez Ud. sea firme en esto y no se deje influenciar por nadie de hacer lo contrario, el pueblo irá recuperando la confianza en Ud. y pensarán nuevamente en Ud. como un presidente capaz de dirigir el país hacia un mejor panorama libre de corrupción para todos.