MACROSCOPIO

¿Saldremos algún día del hoyo?

Durante las últimas semanas, una tormenta ha caído sobre la administración pública y esperamos que siga cayendo, pero así como se han presentado pruebas y capturado a algunos de los responsables de la galopante corrupción, también quisiéramos ver las condenas para los responsables de muertos en los hospitales, de niños iletrados y de los millones de guatemaltecos que hemos sido víctimas de la corrupción y el despilfarro.

Algunos funcionarios ya estarán con la camisa levantada, pues su castillo de naipes se les puede desmoronar. Lo descubierto y denunciado es solamente, como lo mencioné en un anterior artículo, el espolón de la galera que surca el océano estatal repleta de corruptos.

La denuncia del día jueves que puso en evidencia plazas fantasmas durante la presidencia del Congreso de Pedro Muadi, expresidente de la Cámara de Industria, sorprendió a muchos e hizo feliz a otros, pues un empresario es una apetecible presa para algunos políticos, académicos y para todo aquel que patee a la izquierda, veamos algunas estadísticas de las contrataciones del Congreso.

Durante la presidencia del diputado Gudy Rivera había un empleado en el reglón 011 y 664 en el reglón 029.

Con Muadi, el número subió a 133 en el reglón 011 y a 936 en el 029, posteriormente la presidencia le tocó a Arístides Crespo. El aumento fue sustancial, 222 en 011 y 1,112 en el 029, y ahora, con Luis Rabbé, los 011 se redujeron a nueve, pero los 029 pasaron a ser 1,199. ¿Cómo es posible que solamente se investigue a una sola gestión, la del año 2013? De plano porque esa fue la denunciada. Desde hace mucho tiempo se ha sabido de las plazas en el Congreso, agraciadas y guapas “asesoras” con muchos atributos, menos el del conocimiento, reciben salarios de profesionales, y así otros que van desde amigos, parientes y hasta testaferros para contratos. Gente que no tiene ninguna cualificación. Los contratos 011 y 022 son para trabajadores permanentes, y los asesores que deberían estar en 029, ahora son permanentes. Cuando vengan los nuevos diputados contratarán a otros asesores y no podrán despedir a los que ya están, y así se seguirá sumando personal. ¿Qué tal? ¿Y el presupuesto? Lógicamente incrementando.

Ya desde hace días se ha denunciado, sin eco, la proliferación de plazas fantasmas en Aeronáutica Civil y las denuncias han caído en el vacío.

Recientemente, por malos manejos y pago a empresas de cartón, desapareció el Fondo Guatemalteco de la Vivienda (Foguavi). Ahora se llama Fondo para la Vivienda (Fopavi), institución que inicia operaciones sin un centavo, pues a la anterior la dejaron barrida, similar caso al que sucedió con el Fondo Nacional para la Paz, que ahora se llama de otro modo, pero sin fondos, pues lo asignado se esfumó, como se han esfumado más de mil millones que se le han dado a Amsa para Amatitlán.

Cuando vemos esas caravanas de camionetas de lujo en las que se conducen los funcionarios públicos, seguidos de un séquito de abusivos y prepotentes guardaespaldas, y vemos las carencias en todas las dependencias estatales como es el caso de presidios, donde no hay camas para la mayoría de los reclusos, donde hay puertas que ya se caen, los baños están en condiciones lamentables, el hacinamiento es espantoso, nos da grima. Pero parte de ese dinero para remodelaciones ya se lo robaron los de la red de la policía.

La tarea es gigantesca y desgraciadamente el sistema que debe condenar a los corruptos también está contaminado, que es el sistema judicial. ¿Saldremos algún día del hoyo?

hupretij@hotmail.com

ESCRITO POR: