IMAGEN ES PERCEPCIÓN

Salud en cien días

|

Ante una dificultad hay dos posibles actitudes: la primera es cruzarse de brazos y echarle la culpa a quienes provocaron la situación. O luchar por buscar soluciones prácticas y viables, paliativas que puedan aliviar la crisis inmediata y preparar el terreno para cambios más profundos a mediano y largo plazo. Para poder entender el problema de salud y aportar ideas o propuestas tangibles me acerqué a charlar con el médico Juan Antonio Villeda, persona de gran experiencia en el ramo de salud pública, quien me aclaró el panorama y hasta me dio tres soluciones que pueden funcionar y ser ejecutadas de inmediato. Esperamos que el ministro Mariano Rayo pueda analizarlas.

La clave de cualquier gestión exitosa radica en escuchar a los especialistas en la materia, porque aunque aquí los funcionarios públicos se creen “todólogos”, parte de la inteligencia y la buena capacidad ejecutiva es rodearse de personas honestas y con un expertise en cada área de trabajo. Mariano Rayo tiene ventajas sobre cualquier otra persona que haya ocupado ese puesto, primero porque tendrá cierta autonomía y libertad de acción; así también, sabe cómo hacer lobbying político, tanto en el Legislativo como en el Ejecutivo. Porque más que un ministro cuya profesión sea la medicina, la cartera de Salud requiere de un gestor político, con una macrovisión económica y social. Capaz en este momento de diligenciar fuentes de financiamiento extraordinario, provenientes de la iniciativa privada, cooperación internacional y ciudadanos individuales dispuestos a aportar; que podrían ayudar incluso en especie, con la garantía que los recursos serán manejados con transparencia.

El Ministerio de Salud es complicado y requiere literalmente de un ministro “valiente”, capaz de en tan solo 104 días cambiar la imagen de la cartera más lastimada del sistema, pero también la más humana. Para entender mejor la situación, el presupuesto del 2015 es de Q5 mil 800 millones, de los cuales el 70% se invierte en salarios —hay infinidad de plazas fantasmas—, y tan solo el 30% en 83 unidades ejecutoras de salud. La sugerencia:

1. Debe declararse el sistema de salud pública en estado de Calamidad, para poder hacer compras directas y expeditas, con la debida transparencia. Además, sería la oportunidad para reorganizar al personal y negociar con los sindicatos un pacto colectivo en diferentes condiciones.

2. Desconcentrar la prestación de servicios en el departamento de Guatemala, que representa el 30% de la totalidad de la atención a escala nacional. ¿Cómo? Fortaleciendo las tres clínicas periféricas y los dos centros de maternidad en la capital. Estas clínicas deben contar con un cirujano las 24 horas del día, para aumentar el nivel de resolución. Existe un nuevo hospital de 200 camas en Villa Nueva, que por negligencia no se ha aperturado; debe abrirse ya. Y el hospital San Vicente, en zona la 7, está subutilizado y cuenta con 173 camas.

3. Atender la salud preventiva, que implica las enfermedades transmitidas por vectores —dengue y chikungunya—; no se diga vacunación infantil, que fue totalmente desatendida este año.

Imagen_es_percepcion@yahoo.com

ESCRITO POR:

Brenda Sanchinelli

MSc. en Relaciones Internacionales e Imagen Pública. Periodista, experta en Etiqueta. Dama de la Estrella de Italia. Foodie, apasionada por la buena mesa, compartiendo mis experiencias en las redes.