¿YA SABE POR QUIÉNES va a votar?, o mejor pregunto: ¿Usted va a ir a votar? Estamos a cuatro semanas de que se efectúen los comicios y no se percibe que haya un clima propicio para que la población pueda decidir sobre el recambio de autoridades. Si bien siempre ha existido rechazo a las prácticas corruptas de la clase política, nunca en la historia del país se había asistido a un proceso electoral totalmente deslegitimado y atípico. La persistencia de Otto Pérez Molina en la Presidencia es quizá uno de los elementos más desmotivadores porque él representa a ese tipo de político marrullero que lejos de renunciar por el rechazo popular que tiene, se aferra a su puesto pese a ser el principal responsable del saqueo de los recursos del Estado.

EL SISTEMA POLÍTICO ya tocó fondo. En su reciente informe sobre el financiamiento partidario, la Cicig señala que los partidos políticos del país no se mueven en torno a ideología alguna, sino que el centro motor es el dinero. Para ganar una elección no se apela a las ideas sino a regalar desde palanganas, motos, automóviles hasta muñequitos Minions. La gente ya no asiste a los mítines a escuchar propuestas de gobierno sino a ver qué gana, como si se tratara de una lotería. Eso representa mucha plata y la única forma de conseguir pisto es empeñar el alma al mejor postor: empresarios que luego se cobrarán con contratos en el Estado o fondos del narcotráfico. Además, las redes de corrupción se mantienen incólumes en el Estado en espera de los próximos inquilinos que facilitarán las operaciones.

LA POLÍTICA se ha mercantilizado, la campaña electoral es una inversión que luego representará dividendos. Si usted quiere saber de qué tamaño va a ser el saqueo en el próximo gobierno nada más vea qué candidato despliega más propaganda. El congresista norteamericano James P. McGovern se mostró preocupado porque en Guatemala se puede producir un fraude electoral por la vía del financiamiento ilícito, o sea uso de recursos mal habidos para llegar al poder. A ello se agrega la persistencia en las listas de candidatos de diputados y un aspirante a vicepresidente señalados de prácticas corruptas. Si estos no tuvieran el beneficio del antejuicio, ya estarían encarcelados, pero en su lugar siguen en la contienda.

LA MISMA DIRIGENCIA política cerró toda posibilidad de que en estos comicios se pudieran poner en práctica reformas a la Ley Electoral. El empoderamiento que el voto nulo le hubiera podido dar a los electores hubiera hecho la diferencia en estos comicios, pero ya es imposible que se ponga en práctica por las medidas dilatorias de los diputados en aprobar las enmiendas. Ayer nuevamente el PP y Líder obstruyeron la sesión plenaria en el Legislativo, con lo que esta alianza se mantiene como el principal obstáculo para la democratización del sistema político. Tendremos que hacer un enorme esfuerzo para creer que las elecciones son aún un medio para echar al crimen organizado que nos gobierna.

@hshetemul