PUNTO DE VISTA

Venezuela y Guyana

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Recientemente la Exxon Mobil hizo un hallazgo importante de petróleo en la concesión Stabroek, en un punto que está en aguas guyanesas, pero la concesión abarca también áreas de la Zona en Reclamación del Esequibo y de la fachada atlántica del estado Delta Amacuro. La Cancillería venezolana envía una nota de protesta a la Exxon, alegando que está violando el Acuerdo de Ginebra de 1966. La nota de protesta debería haber sido enviada a Guyana. El Acuerdo de Ginebra es un tratado entre Estados y obliga solo a las partes firmantes. Pero la intención del gobierno de Maduro es política: hacer aparecer que el enfrentamiento es con una transnacional norteamericana. Es interesante notar que en el proyecto Stabroek, la Exxon está asociada con la Nexen Petroleum Guyana Limited, que es propiedad de China National Offshore Corporation (CNOOC), socia de PDVSA en la Faja del Orinoco y en el proyecto de gas costa afuera Mariscal de Ayacucho.

En la Gaceta Oficial del 27 de mayo aparece el decreto 1787, en el cual se crean y activan unas Zonas Operativas de Defensa Integral Marítima e Insular (Zodimain). En la Zodimain Atlántica, se incluye además de las áreas marinas y submarinas de nuestra fachada atlántica y de la Zona en Reclamación, buena parte de la fachada atlántica guyanesa, pero también aguas correspondientes a Surinam y Guayana francesa, violando además el límite marítimo entre Guyana y Surinam. El decreto tiene el aspecto positivo de demostrar que en la Fuerza Armada y en el gobierno, por fin, hay preocupación por las acciones de Guyana, tanto en la Zona en Reclamación como en nuestra fachada atlántica. Que el decreto incluya aguas que deberían ser guyanesas, podría verse como un mecanismo de presión para negociar, dado que Guyana también incluye en su plataforma continental áreas que deberían ser claramente venezolanas. El aspecto negativo es la extralimitación del decreto al afectar Surinam, la Guayana francesa y violando un arbitraje de la CIJ. Guyana, en un comunicado oficial del 07-06-2015 afirma que el Decreto No. 1.787 es una violación flagrante del derecho internacional y su nuevo Canciller Carl Greenidge anuncia que denunciará ante la comunidad internacional la agresión venezolana y solicitará la intervención del Secretario General de la ONU, para que, en el marco del Acuerdo de Ginebra, se logre una solución definitiva a la reclamación venezolana y propone la Corte Internacional de Justicia.

Esta crisis puede convertirse en una oportunidad para reactivar la negociación prevista en el Acuerdo de Ginebra. Venezuela debe aprovechar el nuevo e intenso interés de Guyana de delimitar definitivamente con Venezuela para replantear la negociación.

Mientras tanto, Venezuela debe: a) Reafirmar públicamente que la salida libre al Atlántico no es negociable. b) Nombrar, con urgencia, un negociador-facilitador por Venezuela a tiempo completo. C) Mantener el patrullaje tradicional de la Armada en nuestra fachada atlántica.

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