De enero a agosto del 2014 se registraron 56 necropsias en hombres y siete en mujeres por heridas de bala, y tres a mujeres por arma blanca, para un total de 66.
Sin embargo, durante el recién pasado septiembre hubo 12 homicidios en ese departamento, que todavía no están documentados en el sitio web del Inacif, por lo que suman 78 muertes violentas en los primeros 10 meses del año, tres más de las registradas durante todo el 2013.
El vecino Amílcar Villagrán indicó que un factor común en muchos crímenes es la rivalidad entre pandillas, pues hay sectores en los que se han establecido, como en la aldea San Luis, San Sebastián; El Xab y Sibana, El Asintal; el parcelamiento El Rosario, Champerico, y el barrio Monterrey y cantón Perú, en la cabecera.
Mario Cuculista, poblador, comentó que las muertes de pilotos de transporte urbano, extraurbano y taxis evidencian que extorsionistas aprovechan las deficiencias de la Policía Nacional Civil (PNC) y del Ministerio de Gobernación.
Ernesto Alonso, residente de la cabecera, indicó que los crímenes pasionales también se han incrementado.
Guadalupe de García, de la agrupación Sociedad Civil, señaló que la violencia está fuera del control de las autoridades. “Da miedo salir a la calle a cualquier hora”, resaltó.
Andrés Chan, de la junta Local de Seguridad Ciudadana, expresó que se le han hecho propuestas a las autoridades como eficientar los patrullajes a pie de la PNC en puntos estratégicos, o por lo menos donde más hechos delictivos se reportan.