Salud y Familia

La primera visita al ginecólogo

Salvo los casos en que existen antecedentes de riesgo, que la consulta se haya acordado por una derivación específica, el primer encuentro médico-paciente es la mejor oportunidad para hacer un examen físico completo, y también para sentar las bases de la confianza entre el profesional y la paciente.

La primera visita al ginecólogo por lo general siempre despierta en la paciente nerviosismo e algo de incomodidad. Es fundamental lograr que la mujer se sienta cómoda, luego es el momento para que el médico empiece a preguntar acerca de los antecedentes personales y familiares, recomienda el sitio saluddiaria.com.

Algunas preguntas pueden ser íntimas (especialmente las que están relacionadas con el período menstrual o la actividad sexual), por lo cual es posible que la paciente se intimide.

Este es el momento para incluir algunos conceptos sobre anatomía y fisiología del aparato genital y para fomentar pautas de higiene menstrual o indagar sobre conductas de riesgo.

Salvo que la paciente llegue a la consulta por algún antecedente en particular, o derivada por otro especialista, en la primera visita al ginecólogo no se realiza el examen ginecológico.

En caso que la paciente cuente con alguna patología ginecológica durante la niñez o la adolescencia, debe ser atendida por un ginecólogo infantojuvenil.

Las consultas en este caso serán en torno al flujo genital, el prurito vulvar, la dismenorrea, las alteraciones del ciclo, la obesidad y el acné.

¿Cuándo hacer la primera consulta al ginecólogo?

No existe una edad específica para hacer la primera consulta, si durante la infancia o adolescencia, el pediatra observó alguna anormalidad, debe realizarse una derivación al ginecólogo, a esta edad por lo general las pacientes prefieren ser atendidas por una ginecóloga.

Cuando no existe ninguna alteración en su salud, la primera consulta llega cuando la paciente desea evacuar dudas sobre algunos temas puntuales, o cuando empieza a tener relaciones sexuales, el cual debe hacerse un control por año.

Cuando la paciente es menor de edad, es mejor que la niña esté acompañada por su madre o una persona mayor de edad, en caso que hasta ese momento la mujer no haya iniciado su vida sexual, a los 21 años deberá hacerse su primer Papanicolaou.